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Niega Fluvio Ruiz que se pretenda abrir puertas a particulares

Reformas en Pemex, consistentes con planteamientos de PRD y PT: consejero
 
Periódico La Jornada
Miércoles 3 de marzo de 2010, p. 14

El consejero de Petróleos Mexicanos (Pemex) Fluvio César Ruiz Alarcón afirmó ayer en una reunión con la diputación del PRD y legisladores del PT que las disposiciones administrativas de contratación de la paraestatal con la iniciativa privada son constitucionales y consistentes con las propuestas legislativas en materia energética de PRD, PT y Convergencia, avaladas por Andrés Manuel López Obrador.

En ese sentido, el consejero sostuvo que la solicitud de controversia que pidió el diputado Jaime Cárdenas (PT), presente en la reunión, era improcedente.

Ruiz Alarcón dio a conocer un documento en el cual resalta que las disposiciones administrativas expedidas en enero pasado no permiten compartir la renta petrolera ni tampoco la celebración de contratos de riesgo bajo ninguna modalidad.

El ex asesor en materia de energía del grupo parlamentario, una semana después de que Pemex en acuerdo con el PRI modificó la orientación de dichas disposiciones, considera que “se preserva la rectoría del Estado.

También resulta un exceso considerar que con las disposiciones se pretende abrir la puerta a la celebración de contratos con particulares para la explotación de petróleo, toda vez que su propósito es reglamentar los procedimientos de contratación de adquisiciones, arrendamientos, obras públicas y servicios de las actividades sustantivas de carácter productivo de Pemex, aseguró.

Argumentó que las disposiciones permiten revisar contrato por contrato, mediante el Comité de Auditoría y Evaluación de Desempeño, con lo cual se evita cualquier violación al marco constitucional.

De igual manera, resulta falso que las disposiciones permitan que las actividades de exploración y producción de crudo incluyan la fase de refinación, ya que requieren la debida observancia de lo ordenado en diversos artículos constitucionales, arguyó.

Mientras, en la sesión de ayer en el Senado el priísta Francisco Labastida Ochoa advirtió que Pemex está en quiebra técnica debido a la insistencia del gobierno federal en quitarle todas sus ganancias. La situación, agregó, puede empeorar y llevar a un mayor deterioro a la paraestatal, por los nombramientos de funcionarios que no reúnen el perfil profesional requerido.

Luego de que el Senado turnó a comisiones la Estrategia Nacional de Energía, el cuarto informe trimestral de la operación de la paraestatal, así como el del avance del programa para incrementar la eficiencia operativa, Labastida cuestionó la designación de Carlos Treviño como director de Finanzas, pues no tiene experiencia ni crédito alguno en el sector de los hidrocarburos.

Nombraron a Jordy Herrera como director de Pemex-Gas, quien fue subsecretario por más de un año en la Secretaría de Energía, sin tener tampoco ninguna experiencia en la materia.

Agregó: la cereza en el pastel es el reciente nombramiento de Mario Ávila Lizárraga como subdirector de Servicios Marítimos de Pemex, área encargada de la producción de 65 por ciento del petróleo en el país. Se trata de un personaje, dijo, cuyo antecedente profesional es ser vendedor de automóviles.

En la sesión previa de la bancada priísta, senadores reprocharon que Ávila Lizárraga esté íntimamente ligado con la familia Mouriño en Campeche.

Me parece que colocar a gente con ese perfil profesional en la principal empresa petrolera de América Latina sólo contribuye a su deterioro, insistió Labastida más tarde.

Francisco Labastida, presidente de la Comisión de Energía, resaltó que una de las primeras reformas aprobadas en esta legislatura fue a la Ley Federal de Derechos para dotar a Pemex de un régimen fiscal. A pesar de ello, planteó, de los ingresos que por 500 mil 489 millones de pesos obtuvo la empresa, Hacienda le cobró 546 mil 533 millones, esto es, una pérdida total superior a 46 mil millones.

Pemex ganó el año pasado el doble que Exxon. Sin embargo, el régimen fiscal la puso en números rojos. El problema es de tal magnitud, que está en quiebra técnica. Además, tiene deudas por 16 mil millones de pesos, más que la suma de todos sus activos.