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El presidente nacional panista pretende dedicarse a los procesos electorales de 2010

Priístas y algunos perredistas niegan licencia a César Nava; es una venganza, dicen en el PAN
 
Periódico La Jornada
Miércoles 3 de marzo de 2010, p. 13

El Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados, respaldado por un sector de legisladores perredistas, le cobró al presidente del Partido Acción Nacional (PAN), César Nava, el haberse convertido en uno de los principales impulsores de las alianzas electorales entre la derecha y la izquierda para el presente año. El panista fue impedido por la oposición de solicitar licencia a su curul con la finalidad de dedicarse a trabajar en los 15 procesos electorales que se realizarán en igual número de entidades del país.

El poco oficio político de César Nava propició que el pleno camaral le negara la posibilidad de retirarse del cargo de diputado federal hasta el 5 de julio próximo. Con 215 votos en contra de la solicitud, 142 en favor y 11 abstenciones, la mayoría le negó su licencia temporal.

Nava, presidente de la segunda fuerza política en el país, no incluyó en la agenda del día de la sesión de ayer la petición de licencia y pretendió que se aprobara fast track –con la anuencia del presidente de la mesa directiva, Javier Ramírez–, mediante la simple lectura de la solicitud.

Dos horas antes, Nava, acompañado de la coordinadora de la fracción panista en San Lázaro, Josefina Vázquez Mota, anunció en conferencia de prensa que abandonaría temporalmente su posición de diputado federal.

Lo hizo con la seguridad de que le sería concedida: El día de hoy presentaré la solicitud de licencia temporal para ausentarme unos meses del encargo de diputado federal. Se trata de una licencia inspirada en mi compromiso para dedicar 100 por ciento de mi tiempo y 100 por ciento de mi esfuerzo a los 15 procesos electorales en marcha durante 2010. Estoy absolutamente convencido y decidido a enfocar todo mi esfuerzo, todo mi tiempo, para conseguir las victorias que seguramente cosecharemos en este año.

Más tarde, Javier Ramírez, quien estará a cargo de la mesa directiva hasta el último día agosto, solicitó a la secretaría de la presidencia diera a conocer los puntos de acuerdo que se abordarían durante la sesión. El primero fue brevísimo: se concede licencia al diputado José César Nava Vázquez para separarse de sus funciones de diputado federal electo como diputado del Distrito Federal, del 2 de marzo al 5 julio. Llámese a su suplente.

La secretaria de la mesa directiva, la panista María Dolores del Río, pretendió que el trámite pasara desapercibido y solicitó el sentido de la votación, hasta indicar a Ramírez que la mayoría estaba por la afirmativa, cuando no había sido así. No obstante, el priísta José Ramón Martel captó el sentido de la maniobra y demandó al presidente de la mesa directiva que verificara la votación por las dudas que implicaba.

El presidente de la mesa directiva trató de mantener el procedimiento al señalar que la votación ya estaba tomada. Y de ahí devino demanda de priístas, perredistas, verdes y petistas para que la votación se verificara. A esta postura se sumaron Pablo Escudero Morales y Ricardo Sánchez Gálvez. Javier Ramírez tuvo que aceptar la deposición del procedimiento de votación, a pesar de que argumentaba que no tenía solicitud por escrito para aceptar tal hecho.

Aún así, al abrirse la votación nominal, los tableros en el pleno se inclinaron, en sólo cinco minutos por 215 votos en contra de la licencia, 142 en favor y 11 abstenciones. Cuando faltaba un minuto para concluir el conteo, Josefina Vázquez Mota se dirigió apresuradamente a la curul de Francisco Rojas y le preguntó: ¿Cómo podemos solucionar esto, Paco?, y éste le replicó, ¿Qué se puede solucionar en 59 segundos?

De inmediato, un grupo de diputados del PAN comenzó a reclamar desde sus curules a los priístas: Esto es una revancha, se están vengando porque les vamos a ganar en Oaxaca, en Puebla y hasta en Hidalgo.

Al mismo tiempo, Javier Corral y Alberto Pérez Cuevas, quien había solicitado minutos antes más tiempo para recabar la votación, convocaron a los reporteros para ofrecer una conferencia de prensa.

Corral consideró que la licencia de César Nava no podía estar sometida a un criterio de carácter político. Insistió en que la solicitud se inscribió en tiempo y forma en la orden del día y anunció que los coordinadores parlamentarios –sin dar nombres ni partido al que pertenecen– ya habían acordado reponer el procedimiento para la sesión de mañana jueves.

Al preguntar a Corral quién había aceptado la reposición del procedimiento, respondió lacónico: los coordinadores, ya hay un acuerdo.

Y al retirarse del sitio de la conferencia se le insistió que diera nombres de los coordinadores, y caminando respondió: ¡Vamos a reponer el procedimiento!

Más tarde, al preguntarle al coordinador de los priístas, Francisco Rojas, si existía anuencia para reponer el procedimiento, respondió con ironía: Si eso dice el diputado Corral de la decisión que habremos de tomar 237 diputados del PRI el próximo jueves, pues está bien, ¿no? ¡Qué bueno! Ya vio cómo votamos hoy.