ONG exigen proteger a familia de la víctima
Miércoles 3 de marzo de 2010, p. 30
Chihuahua, Chih., 2 de marzo. El asesor del ejido indígena de Baqueachi, Ernesto Rábago Martínez, fue asesinado en el despacho que compartía en la capital del estado con su esposa, la abogada Estela Ángeles Mondragón.
La familia Martínez Mondragón había sido amenazada y atacada al menos dos veces luego que Estela Ángeles Mondragón ganó un viejo litigio contra un grupo de ganaderos que se apropió de terrenos ejidales, el cual tuvo que devolver cuando se comprobó que la posesión era ilegal.
Aproximadamente a las 22:30 horas del lunes, desconocidos entraron en las oficinas, ubicadas en las calles Allende y 23, en el centro de la ciudad, y ultimaron de dos tiros a Ernesto Rábago. Peritos de la Procuraduría de Justicia del estado encontraron un casquillo percutido calibre 25.
“Esto no es una ejecución del crimen organizado; no salgan con eso. Es un asunto de tierras, una venganza, y está relacionada con la defensa de las tierras de los indígenas de Baqueachi”, denunció su viuda, quien apenas el 18 de febrero solicitó al gobierno del estado una investigación sobre un balazo, también de arma calibre 25, que su hija Denny Loya Ángeles recibió en un brazo cuando estaba en la cochera de su vivienda.
Ése fue un primer aviso para mí. Se lo dije al secretario de Gobierno, Sergio Granados. Ya habíamos recibido muchas amenazas a lo largo del juicio sobre las tierras de Baqueachi. El 18 de marzo del año pasado incendiaron mi despacho con dos bombas molotov y emprendieron una campaña en medios locales acusándonos de zapatistas, de guerrilleros
, relató mientras tramitaba ante las autoridades judiciales la entrega del cadáver de su marido.
Entre los responsables de la campaña de hostigamiento en su contra señaló al delegado de la Procuraduría Agraria en el estado, Pedro Martínez Cháirez, de quien dijo: “Estuvo dando entrada a las demandas de los ganaderos en contra de los ejidatarios indígenas y manejando información en los periódicos locales para agredirnos, junto con un personaje del municipio de Carichic al que apodan Huarache Veloz. La bronca era conmigo, no con mi hija ni con Ernesto”.
Organizaciones no gubernamentales, entre ellas la Comisión de Solidaridad y Defensa de los Derechos Humanos, Alianza Sierra Madre, el Centro de Derechos Humanos de la Mujer y El Barzón, entre otras, solicitaron el apoyo de Amnistía Internacional para que las autoridades estatales y federales protejan a la abogada y a su familia.
En junio pasado, los ejidatarios de Baqueachi, encabezados por su gobernador tradicional, Patricio Chávez Gabriel, denunciaron que 30 ganaderos del municipio de Carichic, encabezados por José María Sandoval Espino, dueño de un rancho cercano a los linderos de las tierras ejidales, interpusieron juicios ante le Tribunal Agrario para que les reconocieran derechos sobre las tierras ejidales que invadieron y cercaron.
La Procuraduría Agraria representó a los ganaderos en todos los juicios.