Quiéreme cinco minutos, título de su nuevo libro

No hay literatura real dirigida a
los jóvenes, subraya Anaí Lopez

“Hay productos, telenovelas, películas, sagas de libros de vampíros vegetarianos, pero no hay obras que aborden esa etapa tan intensa”, asegura la autora


Anaí Lopez, Foto: Carlos Cisneros

ERICKA MONTAÑO GARFIAS

A los 15 años no se sabe qué hacer. Más parecemos extraterrestres que seres humanos por todos los cambios hormonales, los cuales hacen que las cosas se vivan de manera muy intensa. A partir de ahí las subidas y bajadas mentales, emocionales y corporales ponen todo de cabeza, pero también es tiempo de aprendizaje, de tropezones, borrones y cuentas nuevas. Punto de partida de la novela Quiéreme cinco minutos, de la escritora mexicana Anaí López, enfocada al público juvenil dentro de una categoría que comienza a caracterizar a esa vertiente en México: menos fantasía, más realidad.

Ese libro, publicado por Montena y que en la Feria Internacional del Palacio de Minería se puede adquirir en el módulo de Random House Mondadori, “es distinto a lo que hay en literatura para jóvenes. Es impresionante el hueco que existe en los medios de entretenimiento respecto de los chavos: hay productos, hay telenovelas, hay películas, sagas enteras de libros de vampiros vegetarianos y estas cosas, pero no hay literatura, no hay nada que realmente hable de lo que está pasando en esa etapa tan impresionantemente intensa de la vida”.

Por ello este libro es distinto. Llama la atención por el lenguaje, “acercarse a la naturaleza del adolescente tal y cual, así como se vive y se habla. La historia de Elena (la protagonista) puede ser muy cercana. Está escrita en primera persona, eso significa que es Elena quien cuenta todo, eso lo hace más cercano y más intenso porque, aparte de contarte lo que pasa también cuenta lo que va sintiendo y pensando en cada momento, en cada paso, de esta aventura intensa.

“Es la historia de Elena, que tiene 15 años, y vive un montón de primeras veces en un lapso de apenas tres semanas: está enamorada intensamente, tiene que romper un corazón, se lo tienen que romper a ella, se roba su primer examen, está en esa cosa superintensa del deseo de pertenencia, pierde a su mejor amiga que la traiciona, pierde a su abuela. No son vampiros enamorándose unos de los otros y chavas en escuelas inverosímiles con romances inverosímiles. Lo que le pasa a Elena son cosas normales pero extraordinarias”, dice Anaí, quien ha trabajado como guionista de programas para jóvenes como Bizbirije, El diván de Valentina, y es jefe de escritores de la nueva serie XY: Ser. Hombre. Hoy. De Once tv México.

Tampoco pretende emitir juicios, ni proponer soluciones. “Absolutamente no, y es importantísimo decirlo, para los jóvenes están estos libros fantasiosos, pero también se tiende a relacionar la literatura juvenil con estos libros con moraleja, los que dicen lo que debería de ser, no hagas esto o lo otro, no se droguen, haz esto; pero la adolescencia es todo lo contrario: es la época en la que quieres experimentar todo, sentir todo y hacer todo”.

En Quiéreme cinco minutos “no hay ninguna postura, ningún juicio moral. Por lo menos lo intento, por supuesto que se cuelan mis puntos de vista, es imposible que eso no suceda, pero lo que traté fue que simplemente sea la vivencia de esta chava, de sus amigos, lo mas cercana y real posible a lo que podría ser, sin emitir juicios de valor, sin decir lo que se debe o no hacer. Espero que sí haya resultado”.

Y esto está pasando en la literatura juvenil en México en la que existe una vasta oferta para todos los gustos. “Habrá gente a la que le mueva de repente leer un libro crudo, real, súper fuerte que tenga que ver con problemas íntimos y donde se pueda identificar, o de repente tendrá ganas de evadirse un poco y de vivir a través de unos personajes fantasiosos en una realidad fantasiosa. Lo importante es que haya esa oferta y esa oportunidad: que puedan decir leo esto o leo lo otro, y sepan que existe esa literatura más real, donde pueden identificarse”.