Cultura
Ver día anteriorJueves 11 de febrero de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

El artista, quien fue destituido por la dictadura militar, recibe homenaje postmortem

Diputados de Brasil reivindican a Vinicius de Moraes como embajador

El poeta y compositor representó a su país en Los Ángeles, París y Montevideo

Foto
Vinicius de Moraes con Maria BethaniaFoto Archivo
 
Periódico La Jornada
Jueves 11 de febrero de 2010, p. a11

Brasilia, 10 de febrero. La Cámara de Diputados de Brasil promovió el martes, en homenaje postmortem, al fallecido poeta y compositor Vinicius de Moraes, al cargo más alto del escalafón diplomático, luego de que el artista fue destituido durante la dictadura militar de 1964-1985.

La decisión, que deberá pasar al Senado, fue adoptada en el pleno de la Cámara y establece que Moraes, fallecido en 1980, sea ascendido a ministro de primera clase (embajador).

Asimismo, se aprueban también los beneficios de pensión como ministro para sus familiares directos.

Moraes (muerto a los 66 años) debió dejar la carrera diplomática en 1968, cuando era primer secretario (tercer rango en la jerarquía), pues fue alejado con base en un acta del gobierno de facto, que entonces relevó de sus puestos a 40 diplomáticos.

La razón que se dio para su alejamiento fue que no se dedicaba por completo al trabajo, debido a la vida bohemia de artista.

Como en 1998 fue amnistiado por la justicia federal, en 2006 su nombre fue de nuevo integrado al cuerpo diplomático. El artista ejerció cargos en Los Ángeles, París y Montevideo.

Moraes realizó la mayor parte de su carrera como escritor, poeta y compositor en Brasil, y fue un divulgador de la cultura de su país en el exterior, además de uno de los más notables exponentes de la música popular brasileña.

En su carrera musical, la más conocida, Moraes tuvo como compañeros, entre otros gigantes de la música brasileña, a Baden Powell y Carlos Lyra, así como una larga sociedad con el guitarrista Toquinho.

Entre sus obras musicales figuran La chica de Ipanema, con Tom Jobim, y Chega de saudade, que muchos consideran el tema que da inicio al género popular del bossa nova.