Ante la falta de recursos de las instituciones culturales del país y la incertidumbre presupuestaria del año próximo, una alternativa viable es estrechar vínculos con la iniciativa privada para que ésta sea socialmente responsable con los creadores mexicanos, y ejerza una especie de mecenazgo que facilite su labor y la difunda entre la gente que no la conoce.

Tal es la propuesta que hoy miércoles dará a conocer un grupo de artistas escénicos, agrupados en la asociación Movimiento por el Arte Mexicano, para hacerse de recursos ante la crisis económica que desde hace muchos años golpea con fuerza al sector cultural del país.

Según un comunicado emitido ayer por los creadores participantes, el apoyo a la actividad artística es altamente rentable para las empresas, ya que les permite acercarse a públicos que de otra manera le resultaría muy difícil o costoso.

Al lamentar que las más de 500 compañías independientes de teatro y danza que hay en el país se encuentren en el virtual abandono financiero por las autoridades, a pesar de su calidad, el grupo sugiere tomar en cuenta enfoques innovadores para resolver el problema, como sucede en otros países de América Latina.

A cambio de su apoyo a los artistas, las empresas contarían con recibos deducibles de impuestos, boletos o pases para diversos espectáculos e inclusive funciones privadas para sus clientes.

Mediante este tipo de convenios entre la iniciativa privada, las instituciones culturales y los artistas escénicos, el principal objetivo es dar la promoción adecuada al teatro y la danza, para convertir ambas disciplinas en un interés cotidiano de las personas, y de esa forma garantizar que sea una actividad más rentable y conocida, con nueva formación de públicos.

Necesidad de mecenazgo

Más que sólo patrocinios, necesitamos un mecenazgo, porque de lo contrario no podemos subsistir en un sistema económico como el que vivimos. Las compañías independientes contribuimos a formar la identidad del país y nuestro trabajo es un reflejo de la sociedad contemporánea, explicó en entrevista telefónica la bailarina Jessica Sandoval.

El grupo, en el que también participan Renata Wimer y Juliana Faesler, ya ha involucrado en el proyecto a la empresa Afán Consultores Internacionales y propiciado el apoyo de funcionarios, como, Carmen Bojórquez, titular de la coordinación de Danza del Instituto Nacional de Bellas Artes; Enrique Singer, director de Teatro de la Universidad Nacional Autónoma de México, e Ignacio Toscano, director del programa Instrumenta Oaxaca.

Las instituciones no van a poder con todo. Por eso tenemos que buscar alternativas para subsistir y que la gente venga a vernos. Hay que sensibilizar a los empresarios de que el arte ayuda a la mejor utilización de los sentidos y es parte de la educación. Esta iniciativa puede dar a las artes escénicas de México el desarrollo y la estabilidad que necesita, afirmó.