La Comisión Permanente demandó al gobierno federal renegociar el pago del rescate bancario, con el propósito de reducir las aportaciones por la amortización de esa deuda, para utilizar los recursos liberados en el financiamiento de programas sociales.

En el dictamen se advierte que en los actuales momentos de crisis, en que ha habido recortes al presupuesto por 85 mil millones de pesos, se debe pensar en reducir la carga fiscal en lo que fue el Fondo Bancario para la Protección del Ahorro (Fobaproa), cuya deuda es de 752 mil millones de pesos.

La propuesta fue presentada por los senadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) María Elena Orantes y Raúl Mejía, quienes advirtieron que los recortes al presupuesto no son la salida para resolver la crisis económica y el gobierno de Felipe Calderón debe asumir la responsabilidad de una política fiscal mal aplicada y evitar que haya repercusiones en los programas sociales que son en beneficio de la población.

Las restricciones y el poco margen de maniobra para encarar una crisis económica tan profunda parten del hecho de una política fiscal débil y dependiente de los ingresos del petróleo, lo que forzosamente se traduce en una baja recaudación de ingresos por parte del gobierno.

Los priístas insisten en que se requiere una reforma fiscal progresiva, con una visión más solidaria y que tenga por finalidad una mejor distribución de la riqueza, para permitir mayores oportunidades de bienestar y desarrollo a los que menos tienen. No es posible, recalcan, que la única propuesta del gobierno federal sea aumentar los tributos y de buscar imponer la tasa del impuesto al valor agregado en medicinas y alimentos.

Proponen que además de una reforma fiscal sólida que ayude a resolver los efectos de la crisis económica, el gobierno federal examine, como medida adicional, renegociar el pago del rescate bancario para utilizar los recursos liberados en el financiamiento de los programas sociales enfocados al bienestar de la población.

La propuesta fue aprobada ayer sin discusión. En entrevista, el coordinador de los senadores del Partido del Trabajo, Ricardo Monreal, dijo que el gobierno de Calderón debe escuchar esta demanda que formula la Comisión Permanente, ya que el pago del Fobaproa es una de las mayores sangrías para las finanzas públicas.

Es un tema, indicó, que su partido siempre ha condenado porque se destinan recursos millonarios para beneficiar a los banqueros, situación que debe revertirse, sobre todo en momentos de shock financiero, como lo definió el secretario de Hacienda.