El Departamento de Estado confirmó que el letrero electrónico de propaganda en el edificio de la sección de intereses de Washington en La Habana fue apagado en junio porque no era efectivo como medio para entregar información al pueblo cubano.

Pero aparentemente también fue un gesto de los cambios en la política bilateral anunciados por el presidente Barack Obama. Hoy, el vocero del Departamento de Estado Ian Kelly sólo confirmó el hecho y señaló que el gobierno cubano, por su parte, también desmanteló algunos espectaculares con mensajes negativos sobre Estados Unidos, así como el graffiti por el edificio de la sección de intereses de Estados Unidos en La Habana.

Estos duelos entre espectaculares no estaba sirviendo en el interés de promover una relación más productiva, afirmó Kelly hoy. A la vez, aseguró que un objetivo de la política de Obama en Cuba es promover el libre flujo de información entre Estados Unidos y Cuba.

Así se apagaron las luces del letrero electrónico, y otro elemento, aunque en gran medida simbólico, de lo que fueron las políticas en esta relación bilateral de la presidencia de George W. Bush.