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Ex presidente Rafsanjani condena arrestos

Dispersa la policía iraní protesta de disidentes
 
Periódico La Jornada
Sábado 18 de julio de 2009, p. 21

Teherán, 17 de julio. La policía iraní arremetió hoy con gases lacrimógenos contra miles de opositores y arrestó a varios de ellos durante enfrentamientos producidos tras los rezos del viernes en la Universidad de Teherán, dirigidos por el ex presidente Akbar Hashemi Rafsanjani, crítico del régimen, quien llamó a reconquistar la confianza perdida tras las elecciones del 12 de junio y pidió la liberación de los manifestantes detenidos.

Alrededor de cien mil seguidores del líder opositor Mirhosein Musavi acudieron, vestidos del simbólico color verde, a la universidad en el centro de Teherán para escuchar el sermón de Rafsanjani, quien pidió al gobierno la puesta en libertad de los encarcelados durante las protestas tras los resultados de las recientes elecciones.

En la situación actual no es necesario que tantas personas estén en la cárcel, dijo Rafsanjani. Deberíamos permitirles regresar con sus familias.

La oposición sostiene que la votación en la que Mahmud Ahmadinejad resultó relecto fue injusta y se niega a reconocer el resultado de los comicios.

Durante los días de violencia tras la jornada electoral, al menos 20 personas murieron y cientos fueron arrestadas.

Rafsanjani pidió también a las autoridades un debate abierto sobre las cuestionadas elecciones presidenciales del 12 de junio, durante el tradicional rezo musulmán de los viernes, que se desarrolló en medio de fuertes medidas de seguridad.

En su primera aparición pública en varias semanas, el influyente ex presidente afirmó que existe una crisis en Irán y acusó al régimen de Teherán de no mostrar suficiente tolerancia ante su propio pueblo.

Después del rezo, se produjeron nuevos choques con las fuerzas de seguridad en las calles cercanas a la universidad, en los que la policía utilizó gas lacrimógeno y realizó arrestos, contaron testigos.

Los manifestantes gritaban consignas contra el gobierno, como Muerte al dictador, en referencia a Ahmadinejad, a quien llamaban a dimitir. Entre los manifestantes se encontraban familias enteras, incluso con niños y personas mayores.

El gobernador de la capital Teherán, Morteza Tamadon, dijo a la agencia noticiosa Irna que fuerzas de seguridad identificarán pronto a los elementos que están tras la organización de los eventos sospechosos.