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Las juntas de grupos, clausuradas en algunos centros por el virus

Afecta la crisis a Alcohólicos Anónimos
 
Periódico La Jornada
Jueves 30 de abril de 2009, p. 26

Mantenerse sobrio es esencial para un alcohólico en recuperación, y la catarsis que se produce en las reuniones es su medicina. No obstante, con la aparición de la influenza porcina esas juntas han sido canceladas en algunos centros, lo que pone en riesgo su tratamiento, señaló Vicente Palacios, jefe de relaciones públicas de la Central Mexicana de Servicios Generales de Alcohólicos Anónimos, quien especificó que 15 por ciento de los 14 mil grupos que operan en el país, y albergan a más de 200 mil personas, han determinado no sesionar.

Especificó que ante esto se han habilitado nuevas formas de apoyo, entre ellas el telefónico, a través de correo electrónico e incluso el chat. No obstante, aseveró que ninguna de esas opciones remplaza a cabalidad la reunión grupal, que da sustento a la terapia, la que salva la vida día a día.

Acotó que en el Distrito Federal y el estado de México, el área más afectada por las medidas restrictivas, operan unos 2 mil 900 grupos y que de haber una nueva recomendación de las autoridades sanitarias para frenar el brote de influenza, acatarán a cabalidad esas instrucciones, pese a que ello podría tener repercusiones lamentables en los tratamientos, y determinarían cancelar las reuniones que se realizan a diario en un horario indistinto y con una duración de una hora y media.

Al respecto Oscar, quien omitió su apellido, comentó que clausurar las sesiones no es positivo para muchos colegas, a los cuales aún les cuesta mucho trabajo mantenerse sobrios, lo que no es su caso, pero expuso que antes de cualquier situación está por encima el bien superior, que es preservar la vida, lo anterior pese a que muchos necesitan con urgencia las reuniones para estar sobrios. Además, confió en que el apoyo espiritual también juegue un papel importante en estos casos.

Por su parte, Palacios apuntó que en muchos grupos no se ha tomado esa medida, porque en promedio asisten 15 personas, lo que no representa un gran conglomerado y es menos que la cantidad que albergan los salones de clases, pero reconoció que hay algunos, los extraordinarios, en que participan 30 o 40 personas.

En torno a lo anterior, acotó que las reuniones que se han pospuesto son las asambleas de distrito o de área, en las que se llegan a reunir más de 120 individuos.

Por último, hizo hincapié en que algunos alcohólicos son más susceptibles a enfermedades como la influenza debido a que la mayoría son muy fumadores y a que tienen, en ciertos casos, debilitadas sus defensas por su mala alimentación en los periodos de crisis.