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El ex dirigente panista, lastimado por lo dicho en el CEN

Sin éxito, Manuel Espino busca cita con Germán Martínez; lo esperó dos horas
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El ex dirigente panista Manuel Espino Barrientos dijo que su interés es que el partido salga unido en esta campaña electoralFoto José Carlo González
 
Periódico La Jornada
Sábado 18 de abril de 2009, p. 9

El ex dirigente panista Manuel Espino Barrientos llegó ayer a la sede nacional del PAN en busca de ser recibido por el presidente de ese instituto político, Germán Martínez Cázares; pero no pudo entrevistarse con él a pesar de que lo esperó más de dos horas.

Ante la falta de respuesta a las solicitudes que ha hecho para una entrevista con Martínez Cázares, Espino decidió apersonarse en el lugar con la esperanza de conseguir una reunión.

En entrevista, dijo que su propósito es pedir al presidente del PAN que reconsidere la postulación de Valdemar Gutiérrez, dirigente de los trabajadores del Seguro Social, como candidato a diputado federal, y se realicen ajustes para que el partido salga unido y fortalecido rumbo a la campaña electoral.

Aclaró que no pidió ser candidato a diputado ni se siente agraviado por no estar en las listas, pero sí se siente lastimado porque desde la sede panista se dice que solicitó ser incorporado y que el CEN lo rechazó. Eso es falso, puntualizó, al criticar que se maneje a la agencia Notimex, que es del gobierno, para desinformar a la opinión pública con mentiras.

Comentó que pedirá respeto para los panistas y que se realicen actos de desagravio, como reinstalar a Alejandra Fernández en el CEN, luego de que fue removida pese a que justificó su inasistencia.

El ex presidente del PAN llegó a la sede partidista después de las 12:30. Preguntó si estaba Germán Martínez, a lo que le respondieron que no, pero sí el secretario general Rogelio Carbajal, con quien se reunió 10 minutos. Para subir a la oficina del funcionario partidista tuvo que registrarse. Ya no tengo las puertas abiertas aquí, refirió mientras realizaba el trámite.

Al bajar, dijo que esperaría en el local hasta que llegara Martínez o le dieran una cita. Ahí permaneció más de dos horas, ocupado en su computadora portátil o con panistas que se acercaban. Después de las tres de la tarde se retiró sin ver al michoacano y sin conseguir una cita.