Como si estuviera preparando las variantes al ataque que tanta falta le hacen y luego del gris empate sin goles frente al Atlante, el Cruz Azul entrenó ayer a puerta cerrada en el estadio Azul. A la rueda de prensa acudieron César Villaluz y Gabino Velasco para proclamar su respeto por Pumas, su rival del miércoles en la Concachampions.

Con hablar monótono, Villaluz adoptó una postura precavida para comentar el partido de vuelta de cuartos de final, a disputarse en el estadio Olímpico México 68. Para el jugador cementero no deben tomarse en cuenta ni las estadísticas ni la ventaja por 1-0 que marcan una jettatura favorable a La Máquina rumbo a semifinales.

“Nos visualizamos en semifinales, pero no nos podemos confiar con ese gol de ventaja, hay que buscar el partido desde el primer minuto en una cancha muy difícil. Uno siempre tiene respeto por el rival. Siempre se buscan nuevos logros y el Mundial de Clubes sin duda es importante, pero para llegar hay que pasar primero por Pumas. que es un rival de respeto.

Hay que culminar allá lo que se ha hecho hasta el momento; las estadísticas están ahí, pero quedan a un lado, debemos hacer bien las cosas en la cancha. No sabemos con qué saldrá Pumas, pero hay que vencer para estar en la siguiente ronda y la idea es pasar a como dé lugar, indicó, inclusive preservando la ventaja mínima, pero si por ahí se dan los goles, mucho mejor, indicó.

En su turno, Velasco no varió el tema: Pumas es un buen equipo, en cualquier momento puede despertar y es un club grande. No creo que tener un gol más sea ventaja; ellos están buscando un lugar y no creo que sea fácil (vencerlos). No estamos pensando en perder, más porque ganarle a equipos como América, Chivas y Pumas viste mucho... Sabemos que últimamente no han caminado las cosas como quisiéramos, admitió.

La desabrida conferencia concluyó, aunque aparte el doctor Alfonso Jiménez confirmó la baja por 10 días del delantero Roberto Ovelar.