Usted está aquí: martes 9 de diciembre de 2008 Economía Los recursos en las Afore, seguros: Carstens

■ Las minusvalías causadas por la volatilidad financiera no implican pérdidas; se revertirán, dice

Los recursos en las Afore, seguros: Carstens

■ La volatilidad en el mercado cambiario, “contenida”, dice

■ Se usaron 14 mil millones de dólares

Víctor Cardoso, Miriam Posada y Claudia Herrera

El secretario de Hacienda, Agustín Carstens Carstens, afirmó que las minusvalías causadas por la volatilidad financiera en los fondos para el retiro de los trabajadores no representan pérdida de recursos. “Se han generado minusvalías de carácter contable, temporal, que no afectan el capital de los trabajadores y se revertirán. Con certeza los recursos en el Sistema de Ahorro para el Retiro, están seguros”, insistió.

Durante su participación en la 19 Convención del Mercado de Valores el funcionario envió un mensaje de tranquilidad a los trabajadores mexicanos, preocupados por la caída en el valor en el último trimestre de las inversiones operadas por las Sociedades de Inversión Especializadas en Fondos para el Retiro (Siefore).

“Es sumamente importante destacar que la afectación en los recursos de los trabajadores es de carácter coyuntural y naturaleza contable”, sostuvo Carstens.

“Se trata de un evento temporal. Históricamente los periodos de crisis son superados y los mercados logran total recuperación.

“Su carácter de contable, añadió, es porque son inversiones de largo plazo y no pueden ser sujetas a valuación diaria, donde se registran las alzas o bajas de los últimos dos meses “que más que dar información, desinforman”.

El secretario de Hacienda adelantó que la Comisión Nacional del Ahorro para el Retiro (Consar) “evalúa este proceso; realmente no queremos caer en un extremo, pero realmente sí (se podría) ajustar este proceso de evaluación para que los trabajadores tengan más información fidedigna sobre el valor de sus sociedades”. Esas inversiones, puntualizó, “han sido un éxito” pues el rendimiento promedio llega a 6 por ciento en términos reales y 13 por ciento en términos nominales, que es “mucho mayor a lo que podría tener cualquier trabajador en otro tipo de alternativas.

Por el lado de los efectos de la crisis financiera internacional en la economía nacional, Carstens Carstens afirmó en primer lugar que la volatilidad en el mercado cambiario originada el pasado 6 de octubre está “contenida” y su impacto ha sido “encapsulado” y “neutralizado” por el Banco de México. Pero el funcionario omitió mencionar que para lograr la estabilizació del mercado cambiario, el banco central utilizó más de 14 mil millones de dólares de las reservas internacionales de divisas del país.

Para Carstens, sin embargo, esa intervención en el mercado de divisas “no se percibe o no se debe leer (como) una intervención de algún nivel de tipo de cambio por las autoridades; es decir, es un mecanismo que mantiene o preserva las características básicas de la flotación, buscando que el mercado tenga menos volatilidad”.

Sin un panorama todavía claro sobre los estragos provocados por la volatilidad cambiaria, el responsable de las finanzas públicas del país delimitó la responsabilidad de ese fenómeno a algunas empresas que se negaron a revelar operaciones, en el mercado de cambios. Contra ellas, dijo, ya se abrió una “muy detallada” investigación por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, el BdeM y la propia Secretaría de Hacienda.

“Tenemos un poco la necesidad de determinar si las empresas que hicieron esas operaciones revelaron toda la información sobre el impacto potencial de esas transacciones sobre su balance. Es una información esencial para todos los tenedores y realmente nos tenemos que cerciorar de que ese haya sido el caso”, puntualizó el funcionario.

Adelantó que también esas tres instituciones, junto con autoridades extranjeras, iniciaron trabajos de monitoreo sobre las llamadas operaciones de derivados que se realizan en el mercado mexicano para “tenerlas en el radar en el momento oportuno”, regularlas en un momento dado y evitar que se conviertan en “explosivas”.

 
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