■ Acepta la invitación de Bush para visitar la Casa Blanca e iniciar “la transición”

Tiene Obama su primera reunión en materia de seguridad nacional

■ “Quiero promover el cambio” en EU: Rahm Emanuel, jefe de equipo del futuro presidente

■ Se incrementa la mayoría demócrata en el Senado; tienen 57 escaños por 40 republicanos

David Brooks (Corresponsal)

Nueva York, 6 de noviembre. Dos días después de su triunfo Barack Obama hizo hoy el primer nombramiento de su nuevo gobierno y continuó con la tarea de conformar un equipo encargado de cumplir con sus promesas de cambio en la política interna y exterior de Estados Unidos.

En Chicago, Obama anunció que Rahm Emanuel, el combativo representante demócrata (por ello su apodo de Rambo), será su jefe de equipo, puesto que es el pivote de la operación de la Casa Blanca. Al señalar que el jefe de equipo es central para promover la agenda presidencial, Obama declaró en un comunicado que “no conozco a nadie mejor para lograr que se hagan las cosas que Rahm Emanuel”.

Se trata de un veterano del gobierno de Bill Clinton durante el cual desempeñó un papel clave para promover varias iniciativas del presidente, incluido el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Posteriormente se volvió un banquero inversionista que ganó una fortuna de millones y regresó a la política al ser electo representante federal en Chicago. Ahora ocupa un puesto de liderazgo en la cámara baja (el cuarto más alto de la jerarquía), el cual abandonará para aceptar regresar a la Casa Blanca con su muy amigo Obama. “Quiero hacer todo lo que pueda para promover el cambio que Estados Unidos necesita”, dijo, y llamó a la unidad bipartidista (algo que provocó reacciones sarcásticas de algunos republicanos, quienes lo conocen como un político ferozmente partidista y soberbio).

Los Clinton perdieron la elección pero ganaron el gobierno

Que el primer nombramiento fuera Emanuel provocó reacciones encontradas dentro y fuera de Washington, algunos se preguntan si implica que regresarán al nuevo gobierno varios veteranos de la administración de Clinton, y hasta hacen bromas sobre cómo los Clinton perdieron la elección pero ganaron el gobierno. Para otros, no sorprendió este nombramiento, y esperan más parecidos, ya que indican que Obama necesita un equipo con amplia experiencia y la capacidad de enfrentar de inmediato una de las peores crisis económicas desde la Gran Depresión, dos guerras, entre otros problemas severos en una de las coyunturas más difíciles para este país.

Sigue la filtración de nombres de políticos y funcionarios que podrían ser nombrados en los puestos claves de su gabinete y su equipo para la Casa Blanca, y se espera que anuncie algunos nombramientos en los próximos días.

Gran parte de los nombres que se escuchan son veteranos del gobierno de Bill Clinton, aunque podría haber algunas sorpresas. También se está considerando a uno o dos republicanos, así como algunas figuras famosas, incluidos Robert F. Kennedy Jr y Carolina Kennedy, entre otros. Pero la idea, según asesores del presidente electo, es proceder de manera rápida pero cuidadosa para evitar demoras y desviaciones que suelen obstaculizar los primeros meses de un nuevo gobierno. Hoy Obama se reunió con sus coordinadores de transición, encabezada por John Podesta, otro veterano de la Casa Blanca de Clinton, encargado de conformar un nuevo gobierno en 10 semanas.

Obama, al acelerarse el proceso de transición, sostuvo este jueves su primera sesión informativa secreta con altos funcionarios de inteligencia sobre asuntos de seguridad nacional en las oficinas de la FBI en Chicago, tal como es la práctica con presidentes electos.

A la vez, anunció que aceptó la invitación de George W. Bush de visitar la Casa Blanca el lunes, con toda su familia. Declaró, también por medio de un comunicado, que él y su esposa, Michelle, se reunirán en lo que será su próximo domicilio con el presidente y Laura Bush “para iniciar el proceso de una transición fluida y efectiva”.

En Washington, Bush afirmó que la Casa Blanca estaba en medio de un esfuerzo “sin precedente” para asegurar la transición. “Enfrentamos desafíos económicos que no harán una pausa para permitir que se acomode el nuevo presidente”, y agregó que “esta también será la primera transición estadunidense en tiempos de guerra en cuatro décadas”.

Este viernes Obama ofrecerá, en Chicago, su primera conferencia de prensa post-electoral. Sus representantes informaron que no se espera que anuncie más nombramientos en esa sesión, y que el enfoque será sobre la política económica.

Mientras todo esto transcurría, Obama continuaba ganando la elección. Hoy se determinó que Carolina del Norte, hasta ahora otro bastión del Partido Republicano, y sede de políticos ultraconservadores como el ex senador Jesse Helms, fue ganado por el presidente electo. Con esa victoria suman nueve los estados ganados por el demócrata que hace cuatro años votaron por Bush. Con los 15 votos electorales de Carolina del Norte, el total de Obama ahora es de 364 (se requieren 270 para ganar la presidencia) contra 162 para McCain. Missouri continúa empatado.

Y los demócratas incrementaron su mayoría en el Senado al concluir el conteo en Oregon derrotando a otro republicano. Con ello han ampliado su mayoría por seis, ahora tienen 57 puestos frente a 40 de los republicanos (faltan tres por determinarse).