■ Hacer campeón al relevo 4x400 en Panamericanos, su meta
Raúl Barreda continúa su labor en busca de otra Ana Guevara
En un día más de entrenamiento, la voz de mando de Raúl Barreda, quien cuenta con su inseparable libreta y cronómetro en mano, se escucha para dar las últimas indicaciones a su numeroso grupo de jóvenes velocistas que dan vida a la pista del Centro Deportivo Olímpico Mexicano, en busca del “atleta ideal, como fue Ana Guevara”, que todavía no detecta.
A Barreda le gustaría llegar a la justa veraniega de Londres 2012 con una competidora como ella, pero reconoce que ese tipo de atletas no se dan de la noche a la mañana. “Se necesita trabajar mucho para lograr que una velocista baje de los 51 segundos y hasta el día de hoy nadie lo ha hecho, pero no hay que desanimarnos, porque ese es mi gran reto”, dice.
No le inquieta el pobre desempeño que tuvo el relevo femenil 4x400 en Pekín (decimocuarto lugar), porque para él la participación fue “buena”, pese a no conseguir el objetivo de estar en la final, tomando en cuenta que los otros países llegaron mucho mejor preparados y que también influyó el bajo rendimiento de Ruth Grajeda y la contaminación.
No obstante, seguirá trabajando con las olímpicas (Gabriela Medina, Zudikey Rodríguez, Nayeli Vela, Maritere Rugeiro), quienes son subcampeonas continentales, con el desafío de coronarse en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011 para tener una mejoría en la justa británica.
Ahora lo motiva que al fin se hará oficial la escuela de velocidad que llevará su nombre en las instalaciones del Comité Olímpico Mexicano (COM), donde espera arrancar con 32 alumnos, de 15 a 23 años, con el apoyo de los entrenadores mexicanos José de Jesús Isunza, Nicolás Martínez y Mariana Flores.
El proyecto comenzará en enero próximo y será respaldado por el COM, la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, y los institutos estatales, entre ellos el del Distrito Federal, en el que la titular, Ana Guevara, le dará toda su ayuda.