Usted está aquí: jueves 4 de septiembre de 2008 Espectáculos Jazz

Jazz

Antonio Malacara
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■ Hilario Sánchez, desaparecido

En la entrega anterior de esta columna se habló un poco sobre el fallecimiento de la cantante Micheline Chantin Micky (de origen francés, naturalizada mexicana desde hace 40 años) y sobre la casi inmediata y muy extraña desaparición de su esposo, el pianista y compositor Hilario Sánchez del Carpio.

En la misma columna se solicitó ayuda a los lectores que pudieran tener información al respecto, y de inmediato (gracias) se comunicaron el videasta Roberto Bolado y el maestro Gerardo Noriega.

Supimos entonces que Micky falleció la madrugada del 29 de septiembre de 2007, poco después de un viaje a París, y que sus restos fueron cremados en Cuajimalpa. Supimos también que el maestro Hilario se fue a San Cristóbal de las Casas para trabajar en el hotel Posada Real, y que estando allá fue objeto de un homenaje del gobierno del estado de Chiapas.

Pero resulta que el 27 de enero de 2008, sin más, Hilario Sánchez fue reportado como desaparecido, que “sencillamente” no se había presentado a trabajar el día anterior y que nadie sabía de él, lo cual resultaba algo más que extraño, pues el maestro estaba viviendo en una de las habitaciones del mismo hotel donde laboraba.

Gerardo Noriega, sobrino de Hilario, nos comenta: “La administradora del hotel entregó una carta que supuestamente había dejado Hilario antes de desaparecer, pero al investigar este hecho, hubo varias cosas sospechosas. Uno, que en la carta le deja sus instrumentos y otros efectos personales a personas de allá, y que acababa de conocer; pero lo peor es que un grafólogo afirma que la carta no es de su puño y letra”.

Ante tales afirmaciones localizamos a la señora Marina Sánchez del Carpio, hermana menor de Hilario; ella nos comenta: “Todo está muy raro. Mi hermano desapareció desde febrero y nos muestran una supuesta carta suicida de la cual un grafólogo dice que no fue escrita por Hilario.

“Mi hermano Boanerger fue a San Cristóbal para hablar con las autoridades, con la policía, y le dijeron que se estaban haciendo las investigaciones correspondientes, que le iban a hablar máximo en el mes de abril para darle alguna razón, pero hasta ahora, ya primero de septiembre, no nos han hablado. No nos dan ninguna información. Ya levantamos dos actas y no pasa nada. No hay ninguna respuesta de las autoridades.

“La dueña del hotel Posada Real... –continúa la señora Marina–, ahí vivía Hilario, ahí trabajaba como pianista, es la señora Judith Yanini, quien es amiga del gobernador Juan Sabines, y hasta la nombraron Mujer del Año... ya no dejó que se siguiera investigando nada en su hotel; a mi hermano Boanerger, cuando fue para allá, no le dio absolutamente nada de información, lo trató mal. Luego mi hermano armó un cartel con una foto de Hilario y le sacó mil 500 copias y las pegó por todo San Cristóbal; pero en dos días ya no había ni uno solo pegado en los postes. Alguien los quitó. Ahí hay algo turbio.

“Lo que quiero es que me entreguen a mi hermano. Si en verdad se suicidó, quiero que me entreguen su cadáver al menos. Yo lo quiero a él, vivo o muerto. Pero la policía parecer que no hace nada. No sé. Toda su ropa y sus instrumentos estaban en su habitación, pero no apareció ningún documento de identificación, ni su pasaporte, ni su credencial de elector, ni la del Sindicato de Músicos. Nada. Hay algo turbio...”

El maestro Hilario tenía un contrato pendiente para musicalizar varias películas mudas en la Cineteca de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), labor que iniciaría en marzo de este 2008. También se comprometió con Roberto Bolado a participar en un documental que prepara sobre el jazz en México.

Una semana, antes de desaparecer, habló telefónicamente con su hermana Marina y le dijo que en breve viajaría al Distrito Federal para hablar con la gente de la UNAM. Pero de pronto, sin más ni más, el maestro desapareció.

¿Dónde está Hilario Sánchez del Carpio?

¿Las autoridades chiapanecas tienen ya alguna respuesta?

 
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