■ En el gobierno insisten en que no pasa nada; el esquema actual no funciona: productores
El estancamiento agropecuario, por falta de políticas de largo plazo y subejercicios
■ El CNA insta al Estado a definir los mecanismos de asignación, uso y ejercicio de los recursos
El presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Jaime Yesaki Cavazos, denunció que el estancamiento del sector agropecuario se debe a la falta de inversión del gobierno en infraestructura, los subejercicios del presupuesto y la carencia de una política de largo plazo.
“Estamos ante la oportunidad de que el Estado establezca una política agropecuaria diferenciada para el sector social y el productivo empresarial; necesitamos de ella para terminar con los subejercicios del presupuesto y definir el monto destinado a la producción de alimentos para dejar de importar los granos y oleaginosas que los productores mexicanos pueden ofertar; es evidente que el modelo actual ya no funciona”, remarcó en conferencia de prensa.
Al realizar un balance de los cuatro años de gestión al frente del CNA, Yesaki Cavazos sostuvo que los agroempresarios advirtieron desde octubre de 2006 de la crisis alimentaria, pero hay quienes en el gobierno siguen insistiendo en que en el país “no pasa nada. Es evidente que algo está fallando porque no se están ejerciendo los 204 mil millones destinados en este año al campo. No se trata de si es mucho o poco dinero, sino que realmente llegue a los productores; por eso es urgente definir los mecanismos de asignación, uso y ejercicio de los recursos”.
El también productor avícola explicó que el incremento de los granos y oleaginosas ha afectado al sector pecuario, el cual “atraviesa por una situación extremadamente difícil porque tiene insumos caros y precios al consumidor baratos”. La situación, consideró, será más difícil al término de este año y en 2009, ya que es evidente que la diferencia de precios entre los granos y oleaginosas y de las hortalizas causa un desequilibrio tanto a los productores como en el gasto de la población. A ambos hay que protegerlos, dijo.
La avicultura, ejemplificó, había sostenido un crecimiento anual de seis por ciento, pero posiblemente este año no reporte una variación en la oferta e incluso se puede registrar un decremento, ya que no debe olvidarse que los granos y oleaginosas han aumentado 40 por ciento en promedio.
Un apoyo efectivo para el sector pecuario, apuntó, es que el subsidio se entregue por kilogramo de carne o por litros de leche producidos para que el respaldo llegue a los productores pecuarios, ya que el incentivo actual de 200 pesos por tonelada beneficia más a los agricultores que a los productores de carne, huevo y leche.
Respecto a las recientes acciones de la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) de Estados Unidos en torno a las exportaciones de tomate y chile jalapeño, Yesaki Cavazos consideró que el mecanismo sanitario es utilizado por los socios comerciales del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) como una barrera arancelaria. “Es parte del proteccionismo que utilizan para sus productores”, y no descartó que “nos den una repasada; ya fue el jitomate, ahora el chile, mañana será la cebolla o el aguacate y lo hacen porque en México no hay infraestructura suficiente para revisar las importaciones de Estados Unidos para tener la certeza que cubren las normas de inocuidad”.
Al referirse a los transgénicos, el presidente saliente del CNA expuso que “ha faltado determinación de la autoridad para tomar decisiones; ya está la ley de bioseguridad y su reglamento, pero sigue la incertidumbre porque aún no se publica el régimen especial de protección al maíz, a pesar de que ya pasaron los 60 días que se dieron de límite las autoridades. Hay muchas situaciones contradictorias, lo cierto es que con los transgénicos pasa lo mismo que con los autos chocolates: no son legales, pero circulan”.
Hoy, Juan Carlos Cortés García asumirá la presidencia del CNA.