■ Niños, principales afectados por el mineral
El exceso de hierro puede provocar cirrosis
Alrededor de tres mil personas padecen sobrecarga de hierro, principalmente niños que a causa de varios tipos de anemia o fallas en el funcionamiento de la médula ósea requieren de constantes transfusiones de sangre; no obstante, en cada aplicación de plasma sanguíneo también se inyecta hierro, que en un periodo aproximado de 10 años puede ocasionar otro tipo de complicaciones como diabetes, arritmias cardiacas o cirrosis, aseguró Norma López Santiago, hematóloga del Instituto Nacional de Pediatría.
La especialista destacó que hasta hace cinco años se carecía de algún mecanismo para evitar sobrecargas de hierro y con ello, afectaciones secundarias. De ahí que en el país exista un número indeterminado de personas con enfermedades ocasionadas por exceso de hierro en la sangre, o que incluso pierdan la vida sin que se conozca la causa.
En entrevista, López Santiago destacó que las anemias hemolítica y aplásica, que destruyen u ocasionan una deficiente producción de glóbulos rojos, son las principales enfermedades, cuyo control sólo es posible mediante transfusiones de sangre. Se trata, dijo, de individuos que en un periodo de uno a tres años se someten a estos procedimientos en cerca de diez ocasiones.
Aunque no existe información estadística exacta sobre la frecuencia de la sobrecarga de hierro, se sabe que los males que la originan son endémicos de las costas de Veracruz, Campeche, Tabasco, Guerrero y Chiapas.
En cada transfusión, explicó López Santiago, también se administra hierro, pues está contenido en la hemoglobina, a lo que se suma que el organismo carece de mecanismos para eliminar el exceso de este mineral, lo que resulta en acumulaciones anormales en el hígado, corazón, músculos, glándulas endocrinas o pulmón.
Así, en el largo plazo, los pacientes pueden presentar cirrosis, arritmias o insuficiencia cardiaca, defectos en el crecimiento, hipotiroidismo y diabetes mellitus. Debido a este riesgo, los pacientes deben estar bajo supervisión médica constante y monitoreo de los niveles de hierro en su sangre.
López Santiago dijo que en el momento en que comienza la acumular del mineral las personas deben someterse a tratamientos médicos que les ayuden a eliminar la sobrecarga.
Asimismo, afirmó que por falta de control médico adecuado, la expectativa de vida de estos pacientes se reduce entre 25 y 30 años. Agregó que otro problema que existe en el país es el escaso número de hematólogos (expertos en el control de las enfermedades que afectan a la sangre), los cuales suman apenas unos 500, dijo.
Con la finalidad de informar a la población respecto de la sobrecarga de hierro, hoy tendrá lugar una serie de actividades en el hotel Gran Meliá, ubicado en Paseo de la Reforma 1, a partir de las 9 horas.