Usted está aquí: viernes 9 de mayo de 2008 Cultura En SLP, nuevo museo interactivo para propiciar el diálogo entre ciencia y arte

■ La construcción tiene un avance de 80 por ciento y se inaugurará el 4 de septiembre

En SLP, nuevo museo interactivo para propiciar el diálogo entre ciencia y arte

■ El recinto, enclavado en el parque Tangamanga, semeja un laberinto, dice su director

Fabiola Palapa Quijas (Enviada)

Ampliar la imagen Panorámica del Museo Laberinto de las Ciencias y las Artes que se edifica en la capital de San Luis Potosí Panorámica del Museo Laberinto de las Ciencias y las Artes que se edifica en la capital de San Luis Potosí Foto: Cortesía Legorreta + Legorreta

San Luis Potosí, SLP, 8 de mayo. El Museo Laberinto de las Ciencias y las Artes, que se encuentra enclavado en el parque Tangamanga de la capital potosina, permitirá explicar cómo todo está conectado en el universo y cómo la ciencia contemporánea, a diferencia de la clásica, tiene que ver más con la vida cotidiana.

El recinto se despliega alrededor de un gran patio de laberintos. El movimiento del visitante se hace a través de pórticos que rodean ese patio, generando un recorrido variado y misterioso que da acceso a los diferentes pabellones en los que se ubicarán monumentales esculturas para crear un diálogo con la ciencia.

El director del museo, Raúl Cid Campos, considera que “es difícil encontrar puntos de contacto entre ciencia y arte, pero el trabajo científico al igual que el artístico es un quehacer creativo”.

Diseño de Ricardo Legorreta

Promovido por la comunidad científica de San Luis Potosí, y diseñado por el arquitecto Ricardo Legorreta, el museo tiene un avance de 80 por ciento en la construcción y será inaugurado el próximo 4 de septiembre.

El Laberinto de las Ciencias y las Artes –inspirado en el Museo Nacional de Japón Miraikan– contará con cuatro salas temáticas y seis espacios de usos múltiples, así como una zona de talleres.

Para Cid Campos, el museo será un espacio de interlocución entre la comunidad científica potosina y la sociedad. “Queremos que las personas vean a la ciencia como una actividad ordinaria”.

Con un presupuesto inicial de 300 millones de pesos para la creación de infraestructura, el museo interactivo, que tiene una superficie de 9 mil metros cuadrados, cuenta con la sala Entre redes y conexiones, donde se muestra cómo todo funciona como red.

También utilizarán una sala de usos múltiples para explicar a los niños la producción de helados, al sostener una charla con el gerente de una empresa.

La torre central del recinto, con más de 50 metros de altura, será un observatorio con un telescopio en la parte superior.

Una de las cuatro salas temáticas abordará el tema del cosmos, como parte del universo y se dividirá en el mundo de lo imperceptible, de lo pequeño; el mesocosmos, el mundo en que vivimos; y el macrocosmos, el mundo de afuera, donde están los planetas y las estrellas.

Uno de los espacios destinado para usos múltiples se convertirá en una granja con animales, y los veterinarios enseñarán a los visitantes cómo cuidarlos. Asimismo, se contará con una pequeña sala de lectura de cuentos sobre la fauna.

Exposiciones temporales

Cid Campos explica que todas las salas están diseñadas para colocar un objeto monumental con el propósito de atraer la atención de los visitantes, debido a que en el museo los espacios de exhibición no tienen una secuencia.

Un globo terráqueo, de cuatro metros de diámetro, será el atractivo de un área temática en la que se proyectarán imágenes en tiempo real de mareas, bosques e incendios.

El diseño del recinto dedica ciertos espacios para colocar monumentales esculturas de artistas contemporáneos, como Ricardo Regazzoni y Kyoto Otta, ambas obras inspiradas en temáticas del universo.

El museo Laberinto también dispondrá de una sala de exposiciones temporales de arte contemporáneo y para la inauguración se exhibirán cuatro creaciones de artistas mexicanos de la Fundación Jumex.

“La sala –explica el director del recinto– servirá para mostrar ese diálogo entre ciencia y arte. En este laberinto la ciencia llega primero, pero los corredores están destinados al arte, con la idea de que exista ese diálogo en sus vertientes contemporáneas”.

La construcción del edificio se realizó con cantera y las azoteas serán tratadas como jardines; la vegetación de la azotea, jardines y patios será regional para que los visitantes conozcan y promuevan las enormes posibilidades de la flora del lugar.

 
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