■ Defendió a las Chivas en la portería y en cualquier escenario

Murió Tubo Gómez, máximo ídolo del Campeonísimo

■ Junto con La Tota Carbajal y Manuel Camacho, fue pionero en el uso de guantes

■ El año pasado participó con entusiasmo en el campeonato nacional de cachibol

Agencias

Guadalajara, 4 de mayo. El máximo ídolo del Campeonísimo, Jaime Tubo Gómez, el portero que humilló al Atlas y a su porra al sentarse a leer una historieta por falta de trabajo, falleció la mañana de este domingo a la edad de 78 años, víctima de cáncer del páncreas.

El Tubo Gómez fue gran ejemplo de amor a la camiseta, llegó a formar parte del equipo de Chivas de la tercera edad, y practicó otras disciplinas hasta que la lucha contra el cáncer lo retiró. Este domingo perdió la batalla final. Coincidentemente, Chivas terminó por primera vez como líder general desde que se instauraron los torneos cortos.

Gómez nació el 29 de diciembre de 1929 en Manzanillo, Colima, debutó como profesional el 5 de mayo con el Guadalajara en un partido contra San Sebastián de León, y un año después se adueñó de la titularidad rojiblanca, la cual lo llevó a la Selección Nacional.

Consiguió los campeonatos en las temporadas de 1956-1957, 1958-1959, 1959-1960, 1960-1961, 1962-1963, 1963-1964 y 1964-1965. Su calidad le hizo integrar el equipo nacional mayor en los Mundiales de Suecia 1958 y Chile 1962, aunque no disputó ningún partido, al ser suplente de Antonio La Tota Carbajal.

Humor de competencia

El apodo de Tubo fue idea del cronista deportivo Fernando Cortés, pues en la época de Gómez Munguía como jugador de voleibol, a la edad de 15 años, el especialista narraba que el colimense “le pegaba con un tubo al balón”.

Al guardameta de las Chivas se le recuerda, entre muchas otras anécdotas, por haberse recargado en un poste de su portería y hojear una revista para mofarse del equipo rival, el Atlas, durante el clásico tapatío disputado el 24 de abril de 1965.

Fue el máximo símbolo del Guadalajara, por la manera en que sintió y defendió la camiseta rojiblanca en cualquier escenario: la portería, la calle, los medios de difusión, hablando y polemizando con quien se atreviera a burlarse de las Chivas.

Además de su faceta como guardameta, en 1948 fue reconocido como el mejor jugador de voleibol de México, y participó en los Juegos Centroaméricanos de Guatemala 1950, en las disciplinas de futbol y voleibol, además de Juegos Panamericanos.

Jaime el Tubo Gómez militó a lo largo de 15 años con las Chivas, vistió después tres temporadas la casaca de Monterrey, una con Oro de Jalisco y una más con Laguna.

Todavía, el año pasado se enroló en el tercer campeonato nacional de cachibol 2007, donde mostró gran entusiasmo por estar en la región de La Laguna, sede de su último equipo de futbol profesional, del cual se retiró en octubre de 1970.

Ahí, relató a la prensa que él , La Tota Carbajal y Manuel Camacho fueron los tres primeros arqueros mexicanos en utilizar guantes, sólo que el Cinco Copas Carbajal no se adaptó, sentía que le estorbaban y dejó de usarlos.

Deportista de toda la vida, no sólo se aplicó en el cachibol, sino también en atletismo master, con participaciones en campeonatos mundiales en Puerto Rico 2003 y España 2005 en lanzamiento de disco, bala, jabalina y martillo.

El cuerpo del ex futbolista será velado en las Capillas Inumaciones San José, en la ciudad de Guadalajara, y este lunes se realizará una misa de cuerpo presente al mediodía en el templo Expiatorio, de donde saldrá el cortejo fúnebre. Sus restos serán incinerados.