Usted está aquí: lunes 21 de abril de 2008 Política La PGR pierde juicio contra un líder del cártel del Golfo

■ No pudo acreditar a El JC la comisión de delitos: magistrado

La PGR pierde juicio contra un líder del cártel del Golfo

Alfredo Méndez

La Procuraduría General de la República (PGR) perdió en definitiva un litigio judicial por un caso de narcotráfico que confirma la libertad del capo Juan Carlos de la Cruz Reyna, El JC, identificado como el principal operador y coordinador del envío y recepción de cocaína entre el cártel del Golfo y organizaciones criminales de Centro y Sudamérica.

Se trata de la determinación del primer tribunal unitario penal, el cual confirmó tres autos de libertad por igual número de procesos abiertos en contra de El JC por los delitos de tentativa de homicidio, contra la salud y portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército.

No obstante, la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) consignó una nueva averiguación por delincuencia organizada y obtuvo una orden de aprehensión contra ese hombre, apenas días antes de que el tribunal unitario emitiera la resolución absolutoria.

El capo deberá enfrentar ahora este nuevo proceso ante tribunales, motivo por el cual no pudo ser excarcelado.

La captura de Juan Carlos de la Cruz la realizaron militares en agosto pasado, en un restaurante ubicado en la zona de Polanco del Distrito Federal. De inmediato, sin que existiera sentencia judicial definitiva, el gobierno calderonista presumió el hecho como uno de los más golpes más fuertes contra dicha organización delictiva.

De acuerdo con fuentes judiciales, el magistrado Fermín Rivera, al resolver la toca penal 400/2007, determinó que el Ministerio Público adscrito a la SIEDO no pudo acreditar los delitos contra la salud en su modalidad de transportar cocaína y tráfico; homicidio calificado en grado de tentativa, y portación de arma de fuego.

Inicialmente, el juzgado primero de distrito de procesos penales federales con sede en el estado de México había resuelto conceder libertad a El JC por falta de elementos para procesarlo por dichos ilícitos, pero la SIEDO se inconformó.

El hombre, de origen tamaulipeco, fe capturado cuando sostenía una reunión con los colombianos James Sánchez Cristancho, Tulio Enrique Jaramillo Collazos y Carlos Alfonso Betancourt Escobar, quienes fueron puestos a disposición de la PGR.

Las autoridades también detuvieron a Carlos García Altamirano, Héctor Alvarado Ugarte, José Garza Galaviz, Mauricio Mayer del Bosque y Jesús García Enríquez, presuntos integrantes de una célula comandada por De la Cruz.

El JC se desempeñó como policía ministerial en Tamaulipas. La SIEDO asegura en sus acusaciones que, al tiempo que era policía, fungía como sicario al servicio de Jorge Eduardo Costilla Sánchez, El Coss, a quien autoridades de Estados Unidos ubican como uno de los principales líderes del cártel del Golfo tras la captura de Osiel Cárdenas Guillén en 2003.

 
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