Usted está aquí: miércoles 26 de marzo de 2008 Política Inician huelga de hambre dos presos políticos recluidos en Tacotalpa, Tabasco

■ El movimiento es en solidaridad con los encarcelados en Chiapas y para exigir justicia

Inician huelga de hambre dos presos políticos recluidos en Tacotalpa, Tabasco

Hermann Bellinghausen (Enviado)

Macuspana, Tab. 25 de marzo. La otra campaña de Tabasco anunció que los presos políticos Ángel Concepción Pérez Gutiérrez y Francisco Pérez Vázquez, recluidos en la cárcel pública de Tacotalpa, iniciaron una jornada de ayuno solidario por la libertad de los presos políticos de los Centros de Reinserción Social de Sentenciados (Ceresos) de Playas de Catazajá, San Cristóbal de las Casas y Cintalapa, en Chiapas. Su ayuno tiene como propósito pedir la libertad de esos presos en huelga de hambre, y al mismo tiempo llamar la atención sobre su propio encarcelamiento, por un delito que no cometieron y por el cual ya cumplen 11 años y ocho meses privados de la libertad.

La otra campaña en el estado responsabiliza a los gobiernos federal y de Tabasco “por lo que pueda suceder a estos dos presos, quienes han presentado diabetes descompensada, presión arterial alta y problemas gástricos”.

Señalan que los gobiernos estatales de Chiapas y Tabasco, así como el federal, siguen “la política de dejar que los problemas se olviden, que los presos políticos cumplan penas por delitos que no cometieron, y que las organizaciones, colectivos y familiares se cansen exigiendo justicia”. Las autoridades “han ignorado el caso de Ángel y Francisco, pese a las muchas peticiones que abogan por su libertad”, incluyendo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que pronto emitirá una resolución al respecto.

En tanto, los presos de Playas de Catazajá anunciaron que este martes se sumó a la huelga de hambre un recluso más, Pedro Méndez Núñez, “por el mismo delito de secuestro” (que es uno de los cargos contra estos presos del ejido Busiljá (municipio de Ocosingo). “Todos nuestros delitos están fabricados. Nos detuvieron arbitrariamente los judiciales, fuimos golpeados en diferentes partes del cuerpo, nos pusieron bolsas de plástico en la cabeza, asfixiándonos, quemándonos con corriente eléctrica, obligándonos a declararnos culpables. Pero sabemos que somos inocentes, por eso estamos luchando. Ya ni tenemos familia afuera, todos estamos detenidos”. Insisten en demandar su libertad al gobernador Juan Sabines: “Él no sabe cómo nos trataron los paramilitares de la Organización para la Defensa de los Derechos Indígenas y Campesinos, principalmente el ex diputado Pedro Chulín Jiménez, (quien) nos trató como basura, nos escupió la cara diciéndonos que somos indígenas que venimos en la basura”. Son ya 13 personas en la protesta, si bien uno dejó la huelga de hambre, y otra, la única mujer, guarda ayuno en el Cereso 5.

Denuncian que el director del Cereso 17 “ya no nos dio lugar para nuestra huelga, pero vamos a seguir, nada ni nadie nos va a detener”.

También se sumaron hoy a la huelga de hambre dos presos de Pueblo Creyente, en el Cereso 14 de Cintalapa, Pascual Heredia Hernández y Enrique Hernández Hernández, quienes ayunan desde el 12 de febrero, y cumplen 44 días en protesta.

 
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