Usted está aquí: lunes 10 de marzo de 2008 Sociedad y Justicia Niños de quinto y sexto de primaria realizan dietas para perder peso

■ Estudia la UAEM trastornos alimentarios en edades tempranas

Niños de quinto y sexto de primaria realizan dietas para perder peso

Javier Salinas Cesáreo (Corresponsal)

Ecatepec, Méx., 9 de marzo. Un estudio denominado Propiedades psicométricas del test infantil de actitudes alimentarias en una muestra mexicana reveló que 19 por ciento de las niñas y 18 por ciento de los niños encuestados que cursan quinto y sexto grado de primaria en el país, realizan dietas para perder peso.

La investigación, efectuada por especialistas de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), destacó que es evidente que entre los menores se presenta un incremento en el deseo de ser más delgados, y hacer dieta es una situación común entre preadolescentes de 9 a 14 años.

El análisis fue realizado por los investigadores, María del Consuelo Escoto Ponce de León y Esteban Jaime Camacho Ruiz, del Centro Universitario Ecatepec y de la Unidad Académica Profesional Nezahualcóyotl, respectivamente.

María del Consuelo Escoto explicó que en años recientes se ha incrementado el interés por medir las actitudes y conductas de estudiantes de primaria y secundaria con relación a su peso, su figura y su alimentación, y señaló que una de las razones es la presencia de la anorexia nerviosa (AN) y la bulimia nerviosa (BN), que se presentan en este sector de la población.

Dijo que otro motivo para evaluar la conducta alimenticia de los niños es que existen evidencias de que la insatisfacción con la imagen corporal y la dieta están ampliamente distribuidas en estudiantes de secundaria y, más aún, los niños de primaria también pueden mostrar trastornos alimentarios.

En el estudio, los especialistas reportaron que al analizar a los estudiantes de esos grupos se detectó que mientras 17 por ciento de las niñas están insatisfechas con su cuerpo, 25 por ciento de los niños también lo están.

Otro resultado de la investigación destacó que 40 por ciento de preadolescentes de entre 8 y 13 años de edad han intentado activamente perder peso.

Los investigadores consideraron que es necesario documentar el desarrollo de actitudes y conductas alteradas en edades tempranas, “porque puede ayudar a identificar casos tempranos y a mejorar las estrategias de intervención”.

Apuntaron que uno de los instrumentos que se han utilizado para la evaluación de niños y preadolescentes es el test de actitudes alimentarias, que contempla una amplia gama de conductas relacionadas con la alimentación en menores de 15 años. Los académicos darán a conocer los detalles de la investigación que efectuaron en la especializada Revista Mexicana de Sicología.

 
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