■ Los pupilos de Hugo Sánchez cayeron en imprecisiones a la hora de definir
La Sub-23 sumó 280 minutos sin anotar; empató ante Australia con un autogol
■ El Tri sólo podía llegar hasta los tres cuartos de cancha, donde se topó con una defensa atenta ■ Las luces de alarma pasaron de naranja a rojo, cuando faltan nueve días para el preolímpico
Oakland, 2 de marzo. La Sub-23 cosechó un amargo empate 1-1, pero llegó a 280 minutos sin anotar, ya que Australia se encargó de marcar los dos tantos del partido –uno fue autogol– y las luces de alarma pasaron de naranja a rojo en el Tri, cuando sólo faltan nueve días para su debut en el torneo preolímpico que otorgará dos boletos a Pekín 2008.
En el duelo amistoso México tomó ventaja en el tablero del estadio McAfee al minuto 18, cuando el desafortunado Adam D’Apuzzo clavó la pelota en su propia meta. El Tricolor estaba a un paso de la victoria, pero Trot Hearfield se encargó de igualar cartones, al 87 de acción.
La presión consumió no sólo al técnico nacional Hugo Sánchez, sino también a sus pupilos, que cayeron en la precipitación a la hora de definir ante el marco enemigo. Fue un Tri sin norte, sin brújula ni pólvora, carente de alegría a la hora de saltar al campo.
La escuadra mexicana tuvo buenas aproximaciones donde el panorama era claro hasta tres cuartos de cancha, pero ahí se topó siempre con una defensa atenta, un verdadero bloque que muy pocas veces pudo superar, mientras en otras ocasiones perdió el esférico víctima de sus propios yerros.
Al minuto 18 Édgar Castillo avanzó por el carril izquierdo, sacó un centro donde el guardameta y su zaga se hicieron bolas y D’Apuzzo terminó clavando el esférico en meta propia. Eso fue todo, porque Enrique Esqueda, César Villaluz y Santiago Fernández comenzaron a evidenciar su falta de tino.
Los atacantes tricolores remitieron varios disparos cuya trayectoria vigiló con atención el portero australiano Tando Velaphi, quien al minuto 28 se lanzó a la izquierda para desviar un peligroso remate de Esqueda.
En el complemento el Pentapichichi ingresó a Luis Ángel Landín, Édgar Andrade y Luis Omar Hernández. No obstante, la tónica fue la misma; una infructuosa búsqueda con mayor número de centros al área que eran auténticos bombones para el guardameta Velaphi.
Los australianos, ya clasificados a la justa olímpica, ganaron confianza y al minuto 63 Blogoja Celeski dio gran pase filtrado a David Williams y encaró a un Guillermo Ochoa, quien, cayéndose, logró obstruir y desviar el disparo.
El rival vivió sus mejores momentos hasta que Landín falló de forma increíble un par de ocasiones. Primero impactó la pelota en el portero, capturó el rebote, burló y despejó el camino, pero su disparo se estrelló en el poste izquierdo.
El Penta totalizó cinco relevos sin lograr mejoría y al minuto 87 recibió como balde de agua helada el tanto de Australia, cuyo técnico, Graham Arnold, tuvo mejor puntería al ingresar al minuto 75 a Troy Hearfield.
El gol del empate derivó de un excelente saque de banda que fue peinado hasta segundo poste, donde apareció Troy para clavarlo a la derecha del americanista Ochoa.
El desánimo invadió no sólo las tribunas, donde predominara el color verde y los tradicionales sombreros de charro y del Pique en las cabezas de los paisanos. Los del Tri, con rostros desencajados, acudieron al centro del campo para despedirse con un aplauso.
Esperamos “que nos sigan apoyando como hasta ahora”, pidió el auriazul Pablo Barrera a la afición tras el pitazo final.
No importan los resultados: Hugo
En conferencia de prensa, Hugo Sánchez recalcó que en los partidos de preparación no son importantes los resultados, pues sólo son ensayos rumbo a la competencia importante.
“Esos juegos no se planearon ni para ganarlos todos, ni para empatar ni saber cuántos goles vamos a meter, o cuántos va a anotar el rival. El resultado es lo de menos –no importa–, ni cuando le ganamos a Chile ni cuando perdimos ante Ecuador”, puntualizó Hugo al subrayar que el objetivo es llegar al preolímpico en buen nivel.
Aseguró que sus dirigidos saben “a qué se juega”, por lo que está satisfecho con el funcionamiento, el cual es cada vez mejor. Sin embargo, aún tiene dudas para dar la lista final de 20 jugadores.
Pese a sus justificantes y ante los cuestionamientos, el Pentapichichi aceptó que la efectividad “está por debajo de lo que estoy solicitando, necesito 50 por ciento. Contra Chile tuvimos 11 ocasiones claras y debimos meter cinco goles”.
Aseguró que en el campo hacen lo más difícil, “crear situaciones de anotación, pero no estamos siendo eficaces en el remate final”.