Usted está aquí: sábado 9 de febrero de 2008 Espectáculos The Big Sellout desgrana la realidad de la privatización

Se exhibe hoy en Cinépolis Diana, seguido de un debate

The Big Sellout desgrana la realidad de la privatización

Roberto González Amador

Ampliar la imagen Uno de los casos que presenta Florian Opitz es el de Cochabamba, Bolivia (en la imagen), donde se generó una revuelta luego de que las empresas de agua fueron entregadas a trasnacionales Uno de los casos que presenta Florian Opitz es el de Cochabamba, Bolivia (en la imagen), donde se generó una revuelta luego de que las empresas de agua fueron entregadas a trasnacionales

Cuando una empresa o un bien público son privatizados, alguien gana y otros pierden. No se trata, en ningún caso, de un fenómeno abstracto, como lo muestra, con contundentes historias, el director Florian Opitz (Saarbruecken, Alemania, 1973) en The Big Sellout.

Opitz, documentalista con formación de sicólogo e historiador, presenta seis casos que van desde la privatización de los ferrocarriles en Gran Bretaña, durante el gobierno del conservador John Major, a la revuelta que siguió a la entrega a empresas trasnacionales del servicio de agua en Cochabamba, tercera ciudad de Bolivia, en 2000.

A partir de historias breves, centradas en personajes que actúan en un entorno de resistencia, el director va desgranando, con humor y a veces dramatismo, las secuelas que deja en una comunidad específica el cambio de régimen de propiedad pública a privada en empresas o servicios.

Muestra a jubilados del barrio de Soweto, Sudáfrica, uno de los enclaves de la lucha contra el régimen del apartheid, que hoy cobran una pensión menor a la factura de la luz que les envía cada mes la compañía que adquirió a la empresa estatal. O a una mujer filipina que recuerda los beneficios que recibía del otrora sistema de salud pública y hoy debe recorrer oficinas y clínicas para mendigar una diálisis para su hijo.

Consecuencias políticas y sociales

La privatización de empresas y bienes públicos es, en la actualidad, objeto de cuestionamiento, no sólo en el plano político, como ocurre en países donde los gobiernos tratan de fortalecer a las empresas estatales, sino también en el tejido social. Encuestas recientes de Latinbarómetro y estudios del Banco Mundial han documentado el rechazo de las sociedades latinoamericanas a porfiar en un camino que ha dejado un buen número de perdedores y un puñado de ganadores. Es en ese sentido que The Big Sellout es una película política y, en el contexto mexicano, actual.

A propósito de esta cinta, Joseph Stiglitz, una de las voces que se escuchan en la serie de relatos, llama la atención sobre el efecto en las personas de las políticas de privatización. “Cuando usted deja caer bombas desde una altura de 50 mil pies, no ve dónde aterrizaron, no ve el daño. Esto es lo mismo que sucede en la economía cuando usted habla de la estadística y no piensa en la gente que está detrás de esa estadística”, dice el Nobel.

Immanuel Wallerstein, sociólogo, historiador, voz influyente en el mundo de las ideas –articulista de La Jornada– escribió en California Newsreel que The Big Sellout muestra el daño que la “privatización irresponsable” provoca en la vida de las personas, y enseña las formas de resistencia individual y colectiva (www.newsreel.org/nav/title.asp?tc=CN0200).

The Big Sellout se exhibe como parte de la gira de documentales Ambulante 2008. Hoy se presenta en el Cinépolis Diana a las 18:45 horas, seguido del debate La gran venta. Privatización de recursos naturales. www.ambulante.com.mx, www.thebigsellout.org

Título original: Der Große Ausverkauf. Alemania. 2006. Inglés, español y filipino. 94 minutos. Color. Director: Florian Opitz. Director de fotografía: Andy Lehmann. Edición: Niko Remus. Guión: Florian Opitz. Producción: Felix Blue, Arne Ludwig. Música: Pluramon.

 
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