Usted está aquí: viernes 8 de febrero de 2008 Estados Millón y medio de mexiquenses, rodeados de agua... y sedientos

Se agrava la escasez en la entidad, que concentra tres de las principales cuencas del país

Millón y medio de mexiquenses, rodeados de agua... y sedientos

Falta de infraestructura, construcción anárquica de vivienda y crecimiento demográfico merman la disponibilidad

El volumen que se pierde en fugas equivale al suministro del sistema Cutzamala

Silvia Chávez, Israel Dávila, René Ramón y Javier Salinas (Corresponsales)

Ampliar la imagen Trabajadores de la Comisión Nacional del Agua reparan una de las tuberías del sistema Cutzamala, en el cerro de Pericos, ubicado en el poblado de San Pablo Autopan, estado de México, el pasado 27 de enero Trabajadores de la Comisión Nacional del Agua reparan una de las tuberías del sistema Cutzamala, en el cerro de Pericos, ubicado en el poblado de San Pablo Autopan, estado de México, el pasado 27 de enero Foto: Marco Peláez

Toluca, Méx., 7 de febrero. A pesar de que en el estado de México se encuentran tres de las principales cuencas hidrológicas del país (la del Balsas, la del Lerma y la del valle de México) y que éstas son la principal fuente de abastecimiento para la zona centro, al menos millón y medio de habitantes de la entidad, 10 por ciento de la población estatal carece de agua potable.

Esta cantidad puede duplicarse si se incluye a las familias que tienen acceso irregular a este recurso,dos días a la semana y por horas, como ocurre en decenas de colonias de Ecatepec, La Paz o Tultitlán, entre otras.

La escasez afecta a todo el estado, pero en la zona oriente es más grave por la gran cantidad de habitantes.

Existen comunidades enteras de Chimalhuacán, Ixtapaluca y Chicoloapan donde no se cuenta con infraestructura para llevar agua a las viviendas, muchas edificadas en zonas irregulares.

Pero el problema también se observa en lugares donde abunda el líquido. En la zona sur del estado, que abarca los municipios de Donato Guerra, Villa de Allende, Villa Victoria y Amanalco, donde se ubican las presas que alimentan el sistema Cutzamala –que dota de agua al Distrito Federal y parte de su zona conurbada–, hay comunidades que no tienen servicio porque resulta muy caro introducir redes y la población está muy dispersa.

Otro caso es la región otomí del valle de Toluca, donde se ubica el acuífero del Lerma. Miles de personas no tienen agua por falta de infraestructura. El líquido que de ahí se extrae también se va al Distrito Federal.

Los diagnósticos oficiales sobre la disponibilidad de agua en el estado no son alentadores: existe un déficit de tres metros cúbicos por segundo, que aumentará en un metro cúbico cada año debido a que la población crece a una tasa anual de 350 mil personas.

La mayoría de los acuíferos de las cuencas del Lerma y Chiconautla están sobrexplotados en al menos 150 por ciento, según la Secretaría del Agua del estado de México.

El subsecretario del ramo, Oscar Hernández, afirma que para encontrar agua en algunas zonas ahora es necesario perforar más de 300 metros, cuando antes bastaban 10 metros.

La sobrexplotación ha causado hundimientos en los valles de México y Toluca, y fracturas en las redes de distribución.

Se calcula que 40 por ciento del agua que se distribuye en el estado se pierde por fugas en las redes y en tomas domiciliarias.

El funcionario explicó que el volumen perdido en fugas equivale a casi 16 metros cúbicos por segundo, lo mismo que aporta el Cutzamala al Distrito Federal y al estado de México.

Falta de infraestructura y crecimiento poblacional

El estado de México tiene tres fuentes de agua: los manantiales, que abastecen la zona sur del estado; el sistema Cutzamala, que aporta 5.6 metros cúbicos por segundo, que se distribuyen en 12 municipios del valle de México (el resto del volumen del Cutzamala, 10.4 metros cúbicos por segundo, se va al Distrito Federal) y cientos de pozos ubicados en los municipios, que aportan dos tercios del líquido que se consume en el estado.

La falta de infraestructura para llevar agua del Cutzamala a la zona oriente del estado, pero sobre todo el crecimiento desor denado y la construcción de unidades habitacionales en Chimalhuacán, La Paz, Ixtapaluca y Chicoloapan, entre otros municipios, han hecho insuficientes los pozos y causado una crisis de suministro.

Se calcula que en esta zona al menos, medio millón de personas carecen de agua.

Según los ayuntamientos, en esta región, ubicada a 30 kilómetros del Distrito Federal, hay cuando menos 400 mil habitantes que carecen de toma domiciliara. Además, miles de vecinos han padecido escasez durante más de 20 años pese a tener acceso a la red hidráulica

En La Paz, unos 50 mil habitantes más no reciben agua por falta de presión y tienen que recurrir a las pipas, o la reciben por tandeo durante dos horas al día, en promedio. Martín Lugo Jaramillo, director del organismo operador del agua en Chimalhuacán, reconoce que 6 mil viviendas de ocho colonias tienen tomas domiciliarias, pero no hay suficiente presión para abastecerlas.

En las viviendas colindantes con la franja del Bordo de Xochiaca, en Nezahualcóyotl, también escasea el líquido, sobre todo por falta de presión, pues la Comisión Nacional del Agua no envía suficiente para satisfacer la demanda de un millón 200 mil habitantes.

En toda la zona norte de Neza los habitantes reciben agua por tandeo.

El gobierno del estado asegura que se invertirán más de 2 mil millones de pesos para extender el macrocircuito del sistema Cutzamala a fin de llevar agua a todo el oriente del estado. Ahora los municipios deberán encargarse de las redes de distribución interna para solucionar la escasez, pero las autoridades municipales aseguran no contar con recursos suficientes para sufragar la realización de obras tan costosas.

Ecatepec es otro de los municipios con mayores problemas de agua potable. Las autoridades aseguran que existe un déficit de mil 200 litros por segundo. En más de 100 colonias ubicadas en la parte alta de la Sierra de Guadalupe no existen redes de distribución. En Ciudad Cuauhtémoc, Cuidad Azteca, Ejidos de Ecatepec, Valle de Aragón, Jardines de Santa Clara y Valle Santiago, entre otras zonas, el líquido es suministrado por tandeo.

Este problema se ha agravado por las disputas políticas entre el presidente municipal perredista, José Luis Gutiérrez Cureño, y el gobierno del estado, que ha reducido el caudal para Ecatepec.

Otras zonas del estado, como el llamado corredor azul, formado por municipios gobernados por el Partido Acción Nacional, también enfrentan desabasto.

En Cuautitlán Izcalli, Tultitlán, Tecámac, Zumpango y Atizapán de Zaragoza, el crecimiento demográfico de los últimos 10 años, aunado al hecho de que las inmobiliarias incumplen el compromiso de perforar pozos, ha agravado la escasez.

Además, las fallas en el suministro de energía eléctrica han provocado falta de agua, pues no existe energía para bombearla de los pozos a las viviendas.

En Naucalpan, uno de los municipios más desarrollados de la entidad, 80 mil personas carecen de servicio por falta de infraestructura. Sus viviendas se localizan en la parte serrana del municipio, donde se dificulta la introducción de redes de distribución.

En Toluca, 80 mil personas también sufren de falta de agua. En la mayoría de las viviendas de las comunidades de San Cristóbal Huichochitlán, San Pablo Autopan y San Andrés Cuexcontitlán no existen tomas domiliciliarias, y donde existen el agua llega por tandeo.

Paradójicamente, por en estas comunidades y otras ubicadas en Xonacatlán, Otzolotepec y Temoaya pasan no sólo las tuberías del sistema Cutzamala, que llevan el agua a la ciudad de México, sino que existen más de 200 pozos de la cuenca del Lerma operados por el Distrito Federal, a los cuales los mexiquenses no tienen acceso.

En el sur del estado la situación es similar. Otros 100 mil habitantes de Donato Guerra, Villa de Allende, Villa Victoria y Amanalco no tienen agua porque no existen redes de distribución. En estos municipios se encuentran las presas que alimentan al sistema Cutzamala.

Aun cuando existen acuerdos con el gobierno federal para meter redes a estas comunidades, no ha habido avances, por lo que los indígenas de la zona han amenazado con volver a apoderarse de las instalaciones del sistema Cutzamala en Villa de Allende, para dejar sin agua al Distrito Federal, como ya lo hicieron en diciembre de 2005, cuando cerraron las válvulas de la planta potabilizadora de Berros.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.