“Escanean” peritos terrenos donde se ubicó el 48 Batallón de Infantería
Busca la PGR en Atoyac los restos de 450 víctimas de la guerra sucia
Atoyac de Álvarez, Gro. 1º de febrero. Peritos de la Procuraduría General de la República (PGR) iniciaron el jueves pasado, en terrenos de lo que fuera el 48 Batallón de Infantería del Ejército Mexicano, la primera etapa de exhumación de restos correspondientes a las víctimas de la llamada guerra sucia de los años 70 en este municipio y durante la cual hubo 450 desaparecidos, señalan familiares de las víctimas.
En ese sitio, donde hoy se encuentran las oficinas del ayuntamiento, lo primero que se hizo fue acordonar la zona donde presuntamente se torturaron e inhumaron clandestinamente a ciudadanos involucrados en la lucha por transformar las condiciones sociales.
El año pasado la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), perteneciente a la OEA abrió un expediente que mantiene al Ejército Mexicano bajo escrutinio, por la violación a los derechos humanos durante la llamada guerra sucia en contra de las guerrillas de Lucio Cabañas y Genaro Vázquez –que mañana cumple 36 años de muerto– y de sus simpatizantes, quienes fueron torturados y desaparecidos.
Julio Mata, miembro de la Asociación de Familiares de Detenidos, Desaparecidos y Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos en México (AFADEM), confirmó que el jueves se inició el mandato que hizo la CIDH al gobierno mexicano para buscar el cuerpo del ex alcalde de Atoyac, Rosendo Radilla Pacheco, cuya responsabilidad es haber sido simpatizantes de las dos guerrillas, quien fue detenido en un retén militar en agosto de 1974 y visto, posteriormente, en el Campo Militar número uno.
“Ahora es el acaso de Radilla Pacheco, pero ya tenemos documentado el caso de otras 30 personas, de un total de 450 atoyaquenses, que fueron detenidos, torturados y al parecer, inhumados aquí, según denuncian los familiares.” Mencionó que estos nuevos casos serán presentados, también ante la CIDH en busca de justicia ante la supremacía que existe del fuero militar sobre el civil en México.
De acuerdo con los reportes, todo se encuentra listo para que se inicie el procedimiento forense. En los terrenos donde se ubican las distintas oficinas de las dependencias oficiales de este municipio se colocó una banda amarilla, que dice “prohibido el paso”, alrededor de tres hectáreas en donde aún se pueden ver los galerones cubiertos por láminas de asbesto que en los años 70 sirvieron como cuartel de las fuerzas armadas.
El área es vigilada por policías municipales, instancia que ha obedecido los mandatos federales y ha otorgado los permisos para que se inicie la búsqueda , “el escaneo”, del terreno como lo llaman peritos forenses.
Según los peritos el escaneo se efectuará a partir del sábado durante tres días, se estudiarán las pruebas y posteriormente se divulgarán los resultados. Lo que significa que el trabajo se realizará lejos de las cámaras e integrantes de la prensa.
El sábado se integrará al equipo mexicano de identificación humana el perito canadiense Carlos Jácome, quien hace cuatro años estuvo en esta ciudad para la identificación de los restos de Lucio Cabañas.
“Este es un cementerio clandestino que hizo el Ejército. Es un caso paradigmático que pone en evidencia la violación sistemática de los derechos humanos como política de Estado. Esperamos encontrarlos y hacerles un homenaje, porque no son delincuentes, son personas que lucharon por una vida distinta”, dijo Julio Mata.