Usted está aquí: martes 22 de enero de 2008 Estados Vuelven a cerrar tres minas en Guerrero; piden indemnización

Anciana asegura ser dueña de las tierras donde operan

Vuelven a cerrar tres minas en Guerrero; piden indemnización

Sergio Ocampo Arista (Corresponsal)

Chilpancingo, Gro., 21 de enero. Por segunda vez en una semana, integrantes del Comité Comunitario en Defensa del Pueblo de Xochipala bloquearon los accesos a las minas Los Filos, El Bermejal y a la Unidad Nukay, en el poblado de Mezcala, municipio de Eduardo Neri, en demanda de que la empresa canadiense Luismin les pague 2 millones 600 mil pesos de indemnización por daño ecológico a sus tierras, donde fueron cortados más de mil árboles.

La protesta, que iniciaron alrededor de 100 inconformes a las cinco de la mañana, afectó a alrededor de 2 mil trabajadores que no pudieron ingresar a las tres plantas, de donde se extraen diversos metales, principalmente oro.

El 14 de enero los comuneros cerraron 24 horas los accesos a las tres minas. Según los manifestantes, ese día les fue descontado de su salario a los trabajadores, lo que consideraron un “hecho represivo” de la empresa Luismin.

Entrevistado lugo del inicio del bloqueo, Ricardo Encarnación Calixto, integrante del Comité Comunitario, acusó al gerente de la empresa, Tomás Iturriaga, de negarse a cumplir el acuerdo firmado en mayo para pagar 2 millones 600 mil pesos por daño ecológico a sus tierras. “Ahora demandamos también que se nos entreguen 5 mil árboles para reforestar las tierras dañadas”, apuntó.

En medio del conflicto entre los ejidatarios de Xochipala y la empresa Luismin, la anciana Felícitas López Velázquez se presentó en el plantón y dijo: “Vengo en apoyo de los comuneros, porque estas tierras son mías”.

Mostró un certificado de derechos sobre tierras de uso común con el número 064933, expedido en el sexenio de Vicente Fox. “En 1954 –explicó– hubo una resolución presidencial en favor de mi papá, Francisco López Malabar, en la que se le reconoce como propietario de 2 mil 307 hectáreas, incluidas las tierras donde se encuentra la mina Nukay. Desde entonces no hemos recibido un solo centavo de la empresa Luismin”.

Denunció que la Secretaría de la Reforma Agraria no reconoce dicha resolución, emitida el 7 de abril de 1954; “tampoco están de acuerdo los bienes comunales de la comunidad de Mezcala, pero ya entablamos una demanda en el Tribunal Unitario Agrario, en la ciudad de México. La semana entrante la magistrada María de la Luz Díaz Barriga nos entregará el resolutivo”, concluyó.

Por otro lado, Encarnación Calixto lamentó que no se haya presentado un representante de la minera para dialogar. “Son casi las dos de la tarde y solamente nos han mandado policías municipales y del estado con la finalidad de presionarnos, y a dos ingenieros de menor rango, que no se comprometieron a nada”.

 
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