Usted está aquí: domingo 20 de enero de 2008 Mundo Marchan más de 40 mil en apoyo al presidente ecuatoriano Rafael Correa

Terminan festejos por el primer aniversario de toma de posesión

Marchan más de 40 mil en apoyo al presidente ecuatoriano Rafael Correa

Reuters y Afp

Guayaquil, 19 de enero. Miles de personas vitorearon hoy al presidente de Ecuador, Rafael Correa, y juraron lealtad a la revolución socialista, en una de las mayores muestras de apoyo a un líder de un país que ha visto la caída de tres mandatarios desde 1997.

El multitudinario acto, que tuvo lugar en el puerto de Guayaquil, al suroeste de Quito, cerró los eventos de conmemoración del primer aniversario de la toma de posesión de Correa, quien dice instrumentar una cruzada para instaurar el “socialismo del siglo XXI” en esa nación sudamericana.

El líder nacionalista atravesó la manifestación, que se extendió por la principal avenida de Guayaquil y que se ha convertido en bastión de la oposición, en una plataforma motorizada. Sus adversarios preparan una marcha en esta ciudad para el 24 de enero en el mismo sitio.

Correa, quien gobierna con una popularidad superior a 50 por ciento, según varias encuestas, insistió en calificar de “fiasco” la convocatoria de los opositores.

“Hay que prepararnos para seguir confrontando. Es inevitable la confrontación con la partidocracia, las mafias y la corrupción. Estoy convencido de que, al igual que en 2007, todos los triunfos serán nuestros, todos los éxitos serán del pueblo ecuatoriano y que la revolución ciudadana será irreversible”, dijo Correa a sus seguidores.

Unas 40 mil personas acudieron a la movilización, según la televisora estatal, que transmitió la inusual concentración, que la oposición calificó de “afrenta”. Ésta, afirman, “se alimentó con burócratas obligados a marchar”, lo que Correa desmintió.

El mandatario incluso bailó en la calle con la ministra de Relaciones Exteriores, María Salvador, al igual que otros altos miembros del equipo gubernamental.

Correa promueve varias reformas para regular la economía, habilitarse para un segundo mandato y terminar con una década de inestabilidad política, en la que han desfilado ocho presidentes.

Los cambios serán incorporados a la carta política que redacta la Constituyente, de mayoría oficialista, cuyo texto será sometido a referendo, posiblemente, a mediados de julio próximo.

La Asamblea Constituyente capitalizó el descontento de la población con los partidos tradicionales, a los que Correa acusa de mantener a cinco de cada 10 ecuatorianos en la pobreza y de beneficiarse de los negocios estatales. Los opositores han tenido poca convocatoria para desafiar al presidente, indicaron algunos analistas.

 
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