Usted está aquí: viernes 18 de enero de 2008 Política Por autopista en Chiapas, riesgo de ruptura social

La vía San Cristóbal-Palenque, punta de lanza turística

Por autopista en Chiapas, riesgo de ruptura social

En los planes del gobierno federal, desde el sexenio pasado

Hermann Bellignhausen (Enviado)

Palenque, Chis. 17 de enero. La probable construcción de una autopista entre San Cristóbal de las Casas y Palenque significaría un jugoso negocio turístico para el gobierno y los inversionistas, pues además de agilizar el trayecto entre las dos ciudades chiapanecas, permitiría el establecimiento de un gran centro turístico en las cascadas de Agua Azul.

Ello implicaría una fractura extraordinaria para los territorios indígenas que atraviese, desde los Altos hasta la selva norte. Podría incluir amplias áreas de Tenejapa, San Juan Cancuc, Chilón, Tumbalá y Salto de Agua. Al ser una autopista de peaje, quizás privada, partiría por la mitad todo un mundo, no necesariamente para “integrarlo al progreso”, sino para debilitar sus territorios, desalojarlo y despojarlo.

En Agua Azul veríamos pronto una “Disneylandia” de selva en uno de los parajes más portentosos del trópico mexicano. Los pobladores zapatistas de Nuevo Progeso Agua Azul y los priístas de Ignacio Allende hablan también de una posible presa hidroeléctrica en la cuenca de los ríos Agua Azul, Tulijá y Bascán. Un poblador de Ignacio Allende decía en días recientes: “El gobierno nos quiere sacar de aquí a todos”.

La autopista es uno de los más ambiciosos proyectos del gobierno federal desde el sexenio pasado. Aunque no se ha hecho público cuál sería su trazo, se presume más o menos el mismo que las autoridades mencionaron hace unos años.

Una meta clave del proyecto es desarrollar un centro turístico de envergadura en el complejo de cascadas del río Agua Azul, donde se encuentran asentadas varias comunidades choles y tzeltales, la mayoría autónomas y zapatistas, pertenecientes a los caracoles de Roberto Barrios y Morelia. El epicentro de los “atractivos” naturales ocupa una área de siete a 10 kilómetros, entre los municipios autónomos La Paz y Olga Isabel, región La Montaña (oficiales de Tumbalá y Chilón), pero afectaría una extensión mucho mayor.

Este lunes 14, durante su séptima visita a Chiapas, el presidente Felipe Calderón inauguró el tramo de autopista Arriaga-Ocozocuautla y declaró: “En Chiapas me siento como en casa”. En ese acto, el secretario de Comunicaciones y Transportes, Luis Téllez Kuenzler, expresó: “Quiero hacer una especial mención al apoyo del gobernador Juan Sabines, quien ha sido un decidido promotor de estos grandes corredores”. Aseguró que con el “mismo ánimo de colaboración”, el gobierno federal impulsa el proyecto carretero San Cristóbal de las Casas-Palenque, “porque usted nos ha instruido, señor Presidente”.

Simultáneamente a estos proyectos, las autoridades federales y estatales aprovechan e impulsan la presencia en la región de los grupos paramilitares Opddic y Paz y Justicia para hostigar a “incómodas” comunidades en resistencia, como Bolón Ajaw, Nuevo Progreso Agua Azul, Lindavista, San Miguel y San José, e intentar expulsarlas. ¿Estará dispuesto el gobierno a “invertir” sangre indígena en su proyecto multimillonario?

 
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