Usted está aquí: miércoles 26 de diciembre de 2007 Economía Retira Consorcio Aeroméxico acciones de la bolsa de valores

Podrá realizar operaciones financieras y contables sin entregar reportes al organismo

Retira Consorcio Aeroméxico acciones de la bolsa de valores

Con ésta van 10 las empresas que deslistan o se encuentran en proceso de salir del mercado

La BMV pierde importancia como medio de transparencia de la información corporativa

Juan Antonio Zúñiga

Los nuevos propietarios de Consorcio Aeroméxico resolvieron retirar del mercado bursátil las acciones de la principal línea aérea del país, con lo cual podrá realizar sus movimientos operativos, financieros y contables sin la obligación de realizar reportes a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).

Ahora bajo el control de Banamex y un reducido grupo de inversionistas mayoritarios, Consorcio Aeroméxico hizo pública su decisión de retirarse del mercado bursátil casi dos horas después de que la propia bolsa suspendiera la cotización de sus títulos, el pasado 24 de diciembre, “a fin de evitar que se produzcan condiciones desordenadas en el mercado.”

A través de un comunicado de menos de cuatro líneas, la compañía aérea por la que Banamex y 15 empresarios pagó 249.1 millones de dólares, informó: “se resolvió llevar a cabo la cancelación de la inscripción de las acciones representativas del capital social de la sociedad en el Registro Nacional de Valores, y la cancelación del listado de dichas acciones en la Bolsa Mexicana de Valores.”

La opacidad gana terreno

La decisión fue tomada durante la asamblea extraordinaria de accionistas de Consorcio Aeroméxico, realizada el pasado 21 de diciembre; pero no dejó de llamar la atención que tres días después la BMV suspendiera, primero, la cotización de esas acciones, a las 9:45 horas, y después, a las 11:39, la compañía aérea hiciera pública su determinación de abandonar al mercado mexicano de valores.

Con esta baja son 10 las acciones que han sido deslistadas de la BMV o se encuentran en este proceso el último año. Entre ellas se encuentran las de Industrias Monterrey, después de que la familia Canales Clariond vendió su participación al grupo siredrúrgico Terniun, con sede en Luxemburgo. Una vez integrado al Grupo Carso, las acciones de Sanborns también fueron dadas de baja.

Entre fusiones, absorciones o estrategias de restringir al máximo la información sobre su desenvolvimiento, han abandonado el mercado Móvil Access, Unefon, Maquinaria Diesel, Tekchem, US Commercial Corp. y Ece, la empresa que opera la línea de cafeterías Hard Rock Café, cuya asamblea de accionistas acordó aprobar la cancelación de sus títulos tanto en el Registro Nacional de Valores como en la BMV.

Por esa vía de opacidad transita ahora Consorcio Aeroméxico, controlado propiamente por Banamex, aún cuando en octubre, José Luis Barraza, el nuevo presidente de su consejo de administración y vocero del grupo había anunciado la intención de “deslistar” las acciones de la línea aérea y transitar por un rumbo similar al seguido por el Grupo Posadas, que en 2005 adquirió del gobierno federal las acciones de Mexicana de Aviación y, poco después salieron del mercado de valores también.

Con estas bajas, la BMV pierde importancia como medio de transparencia de la información de las empresas que dejan de participar en el mercado bursátil local, para preservar la información de sus transacciones y desempeños en la más estricta privacidad.

En la BMV participan unas 130 empresas emisoras, con una o más series de acciones; 60 por ciento tienen muy baja bursatilidad y sólo una quinta parte hace movimientos importantes de compra-venta. La Ley del Mercado de Valores obliga a las empresas a hacer transparente su información. Petróleos Mexicanos, la empresa más grande e importante del país así lo hace. Aeroméxico dejó de hacerlo.

 
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