Usted está aquí: jueves 20 de diciembre de 2007 Política Entrevistadores mexicanos de radio y tv, en campaña contra Chávez: Chaderton Matos

También denunció que empresarios financian acciones desestabilizadoras contra Caracas

Entrevistadores mexicanos de radio y tv, en campaña contra Chávez: Chaderton Matos

José Antonio Román

El embajador de Venezuela en México, Roy Chaderton Matos, expresó su preocupación de que la “campaña mediática” de no pocos medios de comunicación en contra del presidente Hugo Chávez ponga en peligro las buenas relaciones diplomáticas en la que están empeñados ambos gobiernos. Además, denunció que “algunas” empresas mexicanas financian “acciones desestabilizadoras” en contra del gobierno chavista.

“Venezuela no es ninguna amenaza para México. Nada de lo que se ha dicho acá en contra del presidente Chávez se ha probado; lo que sí se ha comprobado por parte del gobierno y de la sociedad mexicana es la voluntad del presidente y gobierno venezolano de mejorar las relaciones con México que, también hay que decirlo, ha respondido a las buenas señales enviada por el presidente Felipe Calderón”, dijo en entrevista con La Jornada.

El diplomático venezolano, quien apenas llegó al país hace cuatro meses con la tarea de superar una crisis que vivieron las relaciones diplomáticas entre ambos gobiernos, lamentó que existan medios de información empeñados en crear un clima de animadversión y odio contra el presidente Chávez. “Y el clima es tan intenso que en algún momento, en algún lado, puede ocurrir un exceso de parte de alguien que ponga en peligro esa relación”, dijo el embajador.

Durante la conversación se refirió en varias ocasiones a la voluntad de ambos gobiernos, expresada y ratificada en los hechos, de construir una relación sólida y de confianza mutua, en la que prive la buena voluntad y el deseo de cooperación y de reconstruir una relación que hermana a dos pueblos y sociedades con muchas cosas y factores en común. “Es esto lo que ha permitido la normalización de las relaciones diplomáticas”, alcanzada pese a las múltiples presiones en contra.

Lamentó que los medios mexicanos, particularmente algunos entrevistadores de la televisión y la radio, pero también de la prensa escrita, sean los más agresivos, “en cobertura, volumen e intensidad”, en contra del gobierno chavista, inclusive más que los de España, Colombia y Estados Unidos, en ese orden.

“Ni siquiera estoy lanzando una alerta, solamente expreso mi preocupación, porque no se miden las consecuencias, y por supuesto que esto viene de sectores privados, pero no entiendo por qué son ellos, los empresarios, los que están haciendo un buen negocio en Venezuela, los que están participando en esta campaña de conspiración”.

Y aunque por el momento omitió citar los nombres, dijo que “algunas” empresas mexicanas con presencia en su país financian acciones de desestabilización en contra del gobierno del presidente Chávez. “La información se está redondeando y estamos siguiendo con mucho cuidado estos datos”, dijo. La realidad es que estos empresarios están financiando “acciones desestabilizadoras” impulsadas por la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA).

Aunque también, según reconoció, hay muchos otros empresarios que con su sabiduría para defender sus intereses se han mantenido al margen. “Nadie les pide que apoyen al gobierno de Venezuela, solamente que no conspiren”.

Dijo que la relación comercial se construye “dólar por dólar” y que las empresas mexicanas que están en Venezuela “les ha ido muy bien”, inclusive después de la salida de su país del llamado G-3, integrado junto con México y Colombia. Actualmente el comercio México-Venezuela anda por los 4 mil millones de dólares. Subrayó que estas relaciones comerciales “empezaron a crecer en grande” a partir del gobierno del presidente Chávez.

Aclaró que el clima de animadversión no ha llegado a la cancillería ni al gobierno mexicanos, pero el peligro está latente. “Todavía esta situación no ha contaminado la relación con el gobierno mexicano, tenemos la capacidad para apagar fuegos”, dijo el embajador, quien reconoció que el entendimiento bilateral se construye “ladrillo a ladrillo”, y en ese ánimo se han planteado ya algunas visitas recíprocas a niveles de cancilleres, aunque tampoco se han acordado una fecha en específico. El encuentro de los presidentes llegará en el momento oportuno, pese a las resistencias que pudieran existir, dijo.

Precisó también que hay una larga lista de proyectos y programas de cooperación entre ambos gobiernos para 2008, entre los cuales citó el fomento turístico, fortalecimiento de las inversiones e inclusive la posibilidad de crear una orquesta binacional.

 
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