Usted está aquí: miércoles 12 de diciembre de 2007 Sociedad y Justicia Problema de Eulen, ceses de personal de seguridad en el AICM: autoridades

Pese a las quejas contra la empresa española, se mantendrá contrato dos años más, dicen

Problema de Eulen, ceses de personal de seguridad en el AICM: autoridades

El interés es que se cumpla con la norma y lo que demanda la licitación, afirma vocero

Gabriel León Zaragoza

Autoridades del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) informaron que el movimiento y rotación del personal de seguridad de la empresa Eulen “es problema de ellos”, no de las autoridades aeroportuarias, por lo que no contempla pedir la revisión del contrato, que el mes pasado le fue renovado dos años más por un monto de 317 millones 999 mil pesos.

Precisó que a pesar de las quejas y movimiento de personal que la empresa española ha hecho en años recientes, ésta ha logrado mantener su contrato con el aeropuerto capitalino.

El vocero de la terminal internacional, José Luis Uribe, afirmó que el interés de las autoridades de la terminal aérea es que “la gente (empleada) cumpla con toda la norma y lo que demanda la licitación”.

Indicó que de los mil 111 trabajadores despedidos, “nada más 64 han sido dados de baja a petición directa del AICM” porque han incurrido en malos tratos, abuso y robo a usuarios, y la mayoría de las renuncias que presenta la empresa española, agregó, son de índole personal, toda vez que se trata de empleados que ocupan las plazas en forma temporal hasta que encuentran trabajos mejor remunerados.

Los elementos de seguridad “tiene un nivel mínimo de escolaridad de preparatoria terminada y agarran lo que les ofrece Eulen”, cuyas ofertas de empleo incluso se pueden encontrar en pintas de bardas realizadas en las inmediaciones del aeropuerto, apuntó el directivo del aeropuerto internacional, considerado el más importante de América Latina.

La empresa española cuenta con un contrato con el AICM que le permite desplegar 903 elementos en la terminal uno del aeropuerto. El número de personal aumentará a partir del próximo año y será asignado a la llamada terminal 2, puesta en operación el mes pasado y que, según se ha informado, será formalmente inaugurada en 2008.

Este año, la empresa ganó la licitación aunque ha tenido que cambiar ciento por ciento del personal que este 2007 debía laborar en el aeropuerto.

La Jornada publicó que a pesar de que entre las funciones de los vigilantes de Eulen no se encuentra la revisión de documentos a viajeros en áreas consideradas “estériles” –como salas de última espera, pasillos de traslado entre una sala y otra y zonas de recepción de equipaje–, se han recibido quejas de usuarios en ese sentido.

Los únicos facultados para esas revisiones son los agentes de la Policía Federal Preventiva.

José Luis Uribe confirmó que el personal de Eulen sólo tiene la obligación de revisar que los pasajeros lleven consigo sus pases de abordar y sus identificaciones antes de ingresar a las salas de última espera y en general a las citadas zonas “estériles”; la revisión manual del equipaje de mano y el que se documenta en cada aerolínea, así como la vigilancia en las zonas de acceso en las que se encuentran instalados equipos de rayos equis, bajo la supervisión de personal de la PFP.

Los ceses de personal de Eulen por malos tratos, robo y pérdida de confianza no son nuevos: desde 2004, cuando se inició su participación como parte del equipo de seguridad del aeropuerto, ha habido múltiples denuncias al respecto.

Sobre el tema, José Luis Uribe señaló en entrevista que cuando el AICM emite la convocatoria para licitar los servicios de seguridad, “entre las prioridades que tenemos es que aparte de cubrir con todos los aspectos técnicos, sea una empresa que dé un servicio adecuado, respetuoso y que represente un problema para el viajero”, además de cumplir con la normatividad que establece la Dirección General de Aeronáutica Civil.

Puntualizó que cuando se detectan anomalías o los pasajeros las denuncian, la Subdirección de Seguridad del Aeropuerto “en forma inmediata habla con directivos de la empresa, a fin de que se impongan correctivos.

“Hace dos o tres años, incluso hubo una denuncia de robo en uno de los filtros (donde está situado el personal de Eulen), por lo que se tomó la acción inmediata de dar de baja a los elementos señalados y llevarlos a las autoridades competentes”, destacó.

 
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