Puede México usar la OMC para salvar pactos: campesinos
Para proteger el maíz y el frijol del comercio desleal, ya que a partir de 2008 se eliminan aranceles a las importaciones, las organizaciones campesinas y sociales que participan en la campaña nacional Sin maíz no hay país, sin frijol tampoco, ¡pon a México en tu boca! exigieron que ambos granos salgan del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Sostuvieron que el gobierno mexicano puede invocar los capítulos ocho del TLCAN y 31 de la Organización Mundial de Comercio para que ambos granos queden fuera del acuerdo comercial e interrumpir los compromisos de desgravación, por causas de seguridad nacional.
“El TLCAN estuvo mal negociado, porque no se reconocieron las evidentes asimetrías entre las economías de Estados Unidos y México, además de que ambos gobiernos han aplicado mal el acuerdo, lo que ha provocado graves daños en el país”.
Ayer, una veintena de productores que el pasado lunes empezaron un ayuno en el Ángel de la Independencia, encabezados por Víctor Suárez Carrera, director de la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras del Campo, y Miguel Colunga, dirigente del Frente Democrático Campesino de Chihuahua, entregaron en la embajada de Estados Unidos un documento dirigido al presidente George W. Bush; al ministro de Agricultura, Mike Johanns, y al embajador Antonio O. Garza.
En el documento, los productores mexicanos piden que maíz y frijol salgan del TLCAN, ya que con el tratado no se eliminaron las prácticas desleales de comercio. “Estados Unidos mantiene altos subsidios agrícolas internos y a la exportación que distorsionan el intercambio de productos y provocan caída artificial de los precios internacionales, lo que crea una competencia artificial y desleal con sus exportaciones agropecuarias”.