La PGR no indaga aún el asesinato de Fajardo Anzaldúa
La Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada únicamente investiga la muerte de los dos agentes federales que servían de escolta de Juan Antonio Fajardo Anzaldúa, ex alcalde de Río Bravo, Tamaulipas, quien fuera asesinado por un grupo de sicarios el pasado 29 de noviembre en esa entidad.
La Procuraduría General de la República (PGR) no ha atraído la totalidad de la investigación, a pesar de los señalamientos que Fajardo Anzaldúa hizo durante su campaña a presidente municipal por el PT, en el sentido de que había candidatos que obtenían recursos del crimen organizado para financiar sus campañas y que también eran intimidados para realizar nombramientos en sus gobiernos, especialmente en el área de seguridad.
De acuerdo con información obtenida de fuentes oficiales, la PGR inició la averiguación previa TAMPS/REY-II/2846/2007, por el delito de homicidio en contra de los elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI) Gastón Miguel Segura García y Gerardo Sánchez Castillo, quienes eran escoltas de Fajardo Anzaldúa.
La versión de la PGR contrasta con las declaraciones que hizo el procurador de Justicia de Tamaulipas, José Guadalupe Herrera, días después del homicidio de Fajardo Anzaldúa, ya que dijo que la PGR había ejercido su facultad de atracción respecto del homicidio múltiple, en el cual perdieron la vida el ex candidato petista y cinco personas más, entre ellas los dos agentes de la AFI.
Se debe recordar que Fajardo Anzaldúa había sido presidente municipal de Río Bravo en dos ocasiones, también igual número de veces diputado federal y una más legislador local.
Durante su candidatura denunció no sólo la posibilidad de que el crimen organizado estuviera financiando campañas políticas en su entidad, sino también que una ocasión un grupo armado rodeó su casa de campaña.