Usted está aquí: martes 4 de diciembre de 2007 Estados Cañeros detienen zafra en la cuenca del Papaloapan

Industriales demandan un subsidio de $2 mil millones

Cañeros detienen zafra en la cuenca del Papaloapan

Octavio Vélez Ascencio, Andrés T. Morales y Matilde Pérez U. (Corresponsales y reportera)

Productores cañeros de la cuenca del Papaloapan suspendieron la zafra en Oaxaca. lo que dejó sin suministro los ingenios Adolfo López Mateos, Las Margaritas y El Refugio, ubicados en los municipios de Tuxtepec, Acatlán de Pérez Figueroa y Cosalapa, respectivamente.

El secretario de Desarrollo Rural de Oaxaca, Carlos Torres Avilés, informó que los cañeros de esa entidad –afiliados a la Confederación Nacional Campesina (CNC) y a la Confederación Nacional de Productores Rurales– se sumaron al paro para exigir incremento al precio de la materia prima y pago retroactivo de la zafra pasada. La noche de ayer industriales y cañeros reanudaron negociaciones.

Señaló que al momento de cesar actividades los agricultores habían entregado la caña de 40 por ciento de las 60 mil hectáreas sembradas.

Torres Avilés comentó que algunos cañeros oaxaqueños no han secundado el paro nacional y aún entregan caña por “urgirles el dinero”. Comentó que en la cuenca del Papaloapan “la economía depende mucho de la caña de azúcar, y para los productores es esencial que se les paguen sus cosechas”.

Mientras, el líder de la CNC en Acatlán de Pérez Figueroa, Guillermo López Rodríguez, dijo que el paro nacional “está ganado”, porque propietarios de ingenios recibieron subsidios federales para pagar el incremento de 6 por ciento al precio de la tonelada de caña.

Mientras, la dirigencia nacional de la CNC se manifestó en contra de que el gobierno federal otorgue subsidios a los propietarios de los ingenios para que comercialicen 500 mil toneladas del dulce y, según ellos, puedan mantener el precio de la caña para pagar a los trabajadores 57 por ciento del precio del azúcar, proporción que por ley les corresponde.

El presidente de la CNC, Cruz López Aguilar, adelantó que los cañeros cenecistas y el Comité Ejecutivo Nacional de esa organización “seguiremos exigiendo a las secretarías de Economía y de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación que den a conocer el precio de la caña a la brevedad posible, como marca la Ley para el Desarrollo Sustentable de la Caña de Azúcar”.

Sobre la petición de subsidio para los industriales, presentada por conducto de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera (CNIAA), el dirigente de la CNC destacó: “Nadie que pertenezca a la industria azucarera se puede quejar de que no ha recibido apoyo. Creo que parte del problema actual se debe a que cada que sucede cualquier cosa el gobierno los apoya”.

–¿Los industriales están tratando de aprovecharse?

–Creo que este asunto de la exportación de excedentes del azúcar no es el tema importante en este momento. Sé que no hay un volumen de excedentes como en otras épocas, que llegó a 600 mil toneladas, que no se colocaban en el mercado mexicano. El asunto es que el azúcar en el mercado interno tiene un precio más alto que en los externos. En otras palabras, los industriales tienen mejores condiciones y mejor precio en el mercado nacional. Lo que están haciendo es presionar.”

La CNIAA asegura que hay inventarios de 500 mil toneladas de azúcar, y para exportarlas pide al gobierno federal un apoyo de 2 mil millones de pesos, pues ello, argumentan, evitaría la desestabilización del mercado.

La propuesta de los empresarios argumenta que la política del sector prevé la obligatoriedad de exportar excedentes.

Mientras, productores cañeros cumplieron este lunes cuatro días en plantón ante los 22 ingenios azucareros instalados en Veracruz, en demanda de incremento al precio de la caña. Las siete factorías restantes, dijo el titular de la Coordinación de la Agroindustria Azucarera del gobierno de Veracruz, Juan Carlos Molina, tienen programado iniciar la zafra entre la primera quincena de diciembre y febrero.

Molina reiteró que el gobierno veracruzano mantiene su propuesta de destinar recursos al programa Alianza para el Campo, para sustentar el incremento de entre 6 y 10 por ciento que reclaman los cañeros, aunque estos recursos deberían complementarse con aportaciones de la Secretaría de Economía, más un porcentaje que cubrirían los industriales.

 
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