Usted está aquí: jueves 29 de noviembre de 2007 Deportes Por la mínima diferencia y con ayuda arbitral, Chivas aventaja al Atlante

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Potros recibirá al Guadalajara en Cancún simplemente con la obligación de ganar

Por la mínima diferencia y con ayuda arbitral, Chivas aventaja al Atlante

El silbante Arredondo avaló una pena máxima polémica decretada por el asistente Velásquez

El cuadro tapatío se fue con todo al final y neutralizó a la zaga visitante, pero se le negó el gol

Notimex

Ampliar la imagen Ramón Morales cobró magistralmente la pena máxima que dio el triunfo al conjunto rojiblanco, en el partido de ida jugado en el estadio Jalisco Ramón Morales cobró magistralmente la pena máxima que dio el triunfo al conjunto rojiblanco, en el partido de ida jugado en el estadio Jalisco Foto: Ap

Guadalajara, Jal., 28 de noviembre. El cuerpo arbitral acuchilló al Atlante con un polémico penal, convertido por Ramón Morales, y Chivas tomó ventaja de 1-0, esta noche en la ronda semifinal por el título del torneo Apertura 2007 del futbol mexicano.

En la acción se confabularon el asistente Arturo Velásquez y el árbitro Germán Arredondo, para decretar la pena máxima que concretó el capitán rojiblanco, al minuto 56.

Así que Potros recibirá al Guadalajara el próximo sábado en el estadio Andrés Quintana Roo de Cancún, con la obligación de ganar simplemente, porque aunque sea por la mínima diferencia, el marcador global le daría el pase por mejor ubicación en la tabla general durante la campaña regular.

El primer tiempo, acompañado por la lluvia, fue dinámico, con mayor intensidad en conjunto por los azulgranas, mientras por los rojiblancos fue Alberto Medina el incontenible e hizo trizas a los centrales visitantes.

Chivas inició con todo ante unos Potros que pronto igualaron las acciones e inclusive fueron los primeros en llegar con verdadero peligro a la meta rival.

Al minuto siete el goleador Giancarlo Maldonado hizo gala de su técnica, con un quiebre de cintura a un defensa y luego sacó un potente disparo de larga distancia que se estrelló en el travesaño.

La más clara respuesta tapatía se dio hasta el minuto 21, por conducto del Venado Medina, quien recibió por banda izquierda el balón de Morales, luego se llevó a Muñoz y a la salida del arquero Vilar mandó un centro que Sergio Ávila remató muy incómodo y envió el balón desviado de la meta.

En jugada de toques por el sector izquierdo llegó el esférico a Pereyra, quien hizo recorrido hacia el centro y ejecutó potente disparo que pasó apenas centímetros arriba del arco, al minuto 25.

Otra vez el Venado Medina, al 33, entró por el lado derecho, por donde superó a Carevic y luego mandó un centro que Omar Bravo remató con la cabeza, pero resultó desviado.

El encuentro continuó con la misma dinámica y llegó el protagonismo arbitral al 53, en una llegada por derecha de Bravo con Muñoz pegado; el argentino abrió el brazo derecho y tocó al delantero a la altura del plexo solar, del lado izquierdo, y el local rodó por el césped.

Arredondo señaló saque de meta, pero el asistente Velásquez señaló la pena máxima que avaló el silbante, y Ramón Morales cobró magistralmente con disparo potente, raso y pegado al poste, y aunque Vilar alcanzó a tocar el balón, éste terminó en el fondo de la red, al minuto 56.

Atlante empezó a remar contra la corriente, luego de que se lesionó el defensa Fernando López y el técnico hizo ingresar al camerunés Nkong para ir en busca de goles.

Los problemas defensivos azulgrana se incrementaron, aunque también generaron peligro. Al 61, Bermúdez mandó un centro desde el sector izquierdo y Pereyra remató con la cabeza, pero salió a las manos de Michel.

Luego, a David Toledo le llegó el balón en rebote y realizó un disparo que Ávila desvió y el balón apenas salió arriba del larguero, al 68.

Los siguientes minutos fueron de asedio rojiblanco que hizo ver muy mal a los defensivos visitantes, quienes por pura suerte no recibieron otro gol.

Morales realizó un tiro libre y el portero Vilar sacó la pelota por arriba, al 76. Después Omar Arellano mandó un tiro que se estampó en el poste izquierdo.

Magallón también estrelló un remate en el travesaño y en tiempo de compensación Arellano hizo un disparo que Vilar alcanzó a sacar para enfriar con el silbatazo final la ofensiva tapatía.

 
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