Usted está aquí: viernes 16 de noviembre de 2007 Mundo Deroga el Congreso ecuatoriano decretos del Ejecutivo para financiar obras sociales

Denuncia el gobierno de Correa un “nuevo golpe político” en su contra

Deroga el Congreso ecuatoriano decretos del Ejecutivo para financiar obras sociales

Asegura diputado que el presidente gastó los recursos de manera clientelar y populista

Lo único que hace el Legislativo es sepultarse más en la vergüenza, dice el mandatario

Afp y Dpa

Quito, 15 de noviembre. El gobierno del presidente Rafael Correa y el Congreso unicamaral de Ecuador se enfrascaron hoy en un nuevo conflicto político, luego que la asamblea legislativa derogó 12 decretos de emergencia con los que el Ejecutivo ha financiado programas sociales y de infraestructura.

El miércoles, el Poder Legislativo dominado por la oposición dejó sin efecto los decretos con los que Correa liberaba recursos para salud, educación, sistema penitenciario, campo, carreteras y las industrias petrolera y eléctrica. La decisión fue tomada con 45 votos en favor de 65 asambleístas presentes.

La acción del Congreso –conformada por 100 diputados– fue interpretada por el gobierno como un nuevo golpe político en su contra.

Correa venció el año pasado al magnate bananero, Álvaro Noboa, representante de las fuerzas políticas tradicionales de este país. El mandatario prometió conducir a Ecuador hacia el “socialismo del siglo XXI” y para ello promovió la elección de una Asamblea Constituyente. En comicios celebrados el 30 de septiembre pasado, 80 de las 130 diputaciones disponibles fueron ganadas por el gobernante partido Alianza País.

Al derogar los decretos el Congreso argumentó que ese tipo de normatividad sólo puede ser adoptada en situaciones extremas, como una rebelión interna o una guerra internacional.

Según el diputado Diego Ordóñez, de la Unión Demócrata Cristiana y gestor de la derogatoria, Correa utilizó los decretos “para gastar plata de manera clientelar y populista, obviando los controles”.

En su primera reacción, por medio del ministro de Gobierno, Gustavo Larrea, la decisión de los asambleístas “es un golpe a las acciones que el gobierno viene ejecutando”.

“La patria los sabrá juzgar. Lo único que están haciendo es sepultándose cada vez más en la vergüenza y la indignidad”, dijo el presidente, quien ha cuestionado en varias ocasiones la arbitrariedad de las decisiones del Congreso en la presente administración y en sus relaciones con gobernantes anteriores.

En sus críticas, Correa ha señalado el Poder Legislativo sirve a intereses particulares y grupos minoritarios. Tras el triunfo electoral en septiembre, el mandatario anunció que solicitará a la Constituyente que disuelva la asamblea legislativa por “corrupta e incompetente”.

Los constituyentes iniciarán sus trabajos el 29 de noviembre próximo en sesiones que serán difundidas por televisión.

 
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