En Liverpool de Insurgentes y Félix Cuevas abren tobogán y pista de patinaje

Villa Navideña con todo y nieve en el DF

Encienden el tradicional árbol de 23 metros de alto, con aproximadamente cien mil focos

Jaime Whaley

El simple toque de un botón accionó el complicado sistema de ornato del tradicional árbol de Navidad de la tienda Liverpool Insurgentes que este sábado fue encendido.

Una multitud se arremolinó en torno al ahora par de árboles fabricados con material sintético a prueba de fuego en la esquina de Insurgentes Sur y Félix Cuevas, en donde comparten espacio con una pista para patinar en hielo.

También se puso en funcionamiento la denominada Villa Navideña, en la otra esquina de la tienda (del sistema que comenzó a operar en la capital del país hace 160 años: el primer cajón de mercancías lo estableció un comerciante francés, en 1847).

Tanto pista como atracciones que están en la villa permanecerán abiertas al público hasta el 6 de enero de 2008, de acuerdo a lo informado por Eduardo Mallet, director de Relaciones Públicas de Liverpool, en un horario de 11 de la mañana hasta las nueve de la noche. El precio por acceder a cada una de ellas es de 45 pesos, señaló el ejecutivo.

Por tercer año, la tienda tiene un convenio con uno de sus proveedores, Warner Bros Products, que tiene la titularidad de personajes que son una leyenda en las pantallas cinematográficas, como Bugs Bunny, Taz, Silvestre, Lucas y Tweety (Piolín), cuyas caracterizaciones se encargaron de montar un breve espectáculo musical a la par del festejo del encendido.

Los árboles, profusamente iluminados –el más grande, que se eleva a casi 23 metros, posee mil ramas y cada una tiene 100 focos–, cuentan con un mecanismo neumático para sus piezas en movimiento y fueron construidos por una empresa argentina, explicó el responsable, Damián Justel, quien agregó que tienen pedidos desde Estados Unidos hasta la Patagonia y por ahora trabajan en las seis tiendas que el grupo Liverpool ha abierto desde agosto pasado.

Extensos preparativos

La ocasión fue especial para una inquieta Edelweiss Rothe, la decoradora principal de Liverpool, quien así vio culminado un trabajo que comenzó a planearse desde febrero de este año, y que incluye, además, todo el decorado de interiores, así como el ya famoso taller de juguetería de los laboriosos duendes, que ocupa cuatro de los aparadores que dan a Insurgentes, trabajo que atrae la atención de cuanto viandante transita por el sitio.

Las atracciones de la Villa Navideña son toda una novedad pues, al decir de Mallet, no se tiene dato que se hayan presentado aquí, salvó en Aguascalientes, en donde tuvieron una enorme demanda.

El área cuenta con un largo tobogán de 41 metros, donde, desde una altura de ocho metros, el público –grandes y chicos– puede deslizarse sobre una llanta especial de jueves a domingo; una zona en donde se pueden aventar bolas de nieve y, también con nieve, se puede hacer un muñeco. Hay un espacio de cabañas con diversos temas, en donde se ha destinado una de ellas a la comunidad huichola, que ahí expenderá artesanías.

Para los más pequeños está el trenecito, que por módicos 10 pesos, dará tres vueltas a los niños.