Usted está aquí: viernes 19 de octubre de 2007 Mundo Paran los ferroviarios franceses contra planes de reformar el sistema de pensiones

Se unen los ocho sindicatos para rechazar los cambios del gobierno conservador

Paran los ferroviarios franceses contra planes de reformar el sistema de pensiones

El presidente Nicolas Sarkozy hace oficial la versión del divorcio con su esposa Cecilia

Reuters, Dpa y Afp

Ampliar la imagen Franceses utilizan bicicletas para movilizarse en la capital del país Franceses utilizan bicicletas para movilizarse en la capital del país Foto: Reuters

Ampliar la imagen Protesta de trabajadores en el centro de París Protesta de trabajadores en el centro de París Foto: Reuters

París, 18 de octubre. Una huelga contra los planes del presidente Nicolas Sarkozy de reformar el sistema de pensiones, impulsada principalmente por el sector ferroviario, desató hoy grandes conflictos en los servicios de transportación y embotellamientos en ciudades y carreteras de Francia, pero además constituyó el primer desafío de los sindicatos obreros al gobierno conservador que apenas comenzó en junio pasado.

Algunas rutas regionales de las empresas SNCF y RATP dejaron de prestar servicio desde ayer por la tarde y este jueves sólo 46 de los casi 700 trenes rápidos –conocidos como TGV– salieron a sus destinos. Por primera vez desde 1995, los ocho sindicatos ferroviarios se han unido para rechazar los posibles cambios a las pensiones.

Hace 12 años, las huelgas paralizaron el país durante varias semanas y el gobierno de entonces, que pretendía impulsar una reforma similar a la del conservador Sarkozy, se vio obligado a ceder.

Desde antes de su llegada al poder, Sarkozy expresó su deseo de que los empleados de entidades estatales que cotizan en el conocido “régimen especial” de pensiones igualen su situación a la de los funcionarios y trabajadores del sector privado, con el propósito de aumentar su periodo de contribución laboral de 37 años y medio a 40.

Este sistema fue establecido después de la Segunda Guerra Mundial, que benefició principalmente a los trabajadores manuales y permitió el retiro laboral de miles de franceses a los 55 años de edad.

Sarkozy, economistas y administradores públicos especializados en asuntos laborales y presupuestales argumentan que el gasto dedicado a pagar la pensión de los trabajadores –con una expectativa de vida que rebasa los 70 años– eleva el déficit fiscal y generara un costo a los contribuyentes de 5 mil millones de euros).

La mayoría de los trabajadores sindicalizados han expresado rechazo a la medida, pero algunas agrupaciones proponen como solución a la controversia un aumento a las pensiones para compensar la ampliación la contribución laboral a 40 años.

Las regiones urbanas más afectadas por la paralización del sistema ferroviario fueron las de París, Lyon, Toulouse y Reims, aunque el buen tiempo en la capital permitió a sus habitantes transportarse en motocicletas, bicicletas y hasta patines.

Los sindicatos del sector de la educación, empleados públicos, servicios de correos y de abastecimiento de electricidad y gas respaldaron el llamado a la huelga. La reforma afecta a medio millón de personas y a un millón 100 mil jubilados.

La movilización sindical ocurrió el mismo día en que Sarkozy, de 52 años, hizo oficial la versión de su divorcio de su esposa Cecilia María Sara Isabel Ciganer, de 49 años, después que la prensa local especuló durante varios días sobre esa decisión y –desde hace varios meses– acerca del distanciamiento de la pareja, casada en 1996.

 
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