Usted está aquí: lunes 17 de septiembre de 2007 Estados Ofrece biblioteca pública de León servicios especiales para invidentes

En Guanajuato, unas 23 mil personas son ciegas o consideradas débiles visuales

Ofrece biblioteca pública de León servicios especiales para invidentes

El recinto cuenta con sala braille, además del apoyo de especialistas, afirma la directora

Martín Diego Rodríguez (Corresponsal)

Ampliar la imagen La biblioteca central de Guanajuato, que se ubica en la ciudad de León, cuenta con un acervo de 153 libros de varios títulos, además de computadoras parlantes y otros materiales didácticos para dar atención a los invidentes La biblioteca central de Guanajuato, que se ubica en la ciudad de León, cuenta con un acervo de 153 libros de varios títulos, además de computadoras parlantes y otros materiales didácticos para dar atención a los invidentes Foto: Martín Diego Rodríguez

León, Gto., 16 de septiembre. Casi todas las tardes, Juan García y su nieto Francisco acuden a la biblioteca central, donde son usuarios frecuentes. Mientras Juan lee un libro de poemas escrito por Pablo Neruda, su nieto utiliza una de las computadoras para buscar información y revisar su correo electrónico; incluso se da tiempo para chatear con amigos lejanos y hasta hace impresiones para sus tareas escolares. Ambos son ciegos.

La Biblioteca Central Wigberto Jiménez Moreno es una de las tres públicas de México que cuenta con una sala braille. El recinto tiene hasta la fecha 153 libros escritos en ese sistema, de autores como Juan Rulfo, Miguel de Cervantes Saavedra, Gabriel García Márquez, Pablo Neruda, Paulo Coelho y Emmanuel Kant.

“Tenemos de todo: poemas, filosofía, cuentos, novela, motivación personal, literatura infantil; además hay 200 audiolibros y material didáctico como mapas en relieve, cartografía, cajas de matemáticas, ábacos, y hasta les enseñamos a utilizar el bastón blanco”, comentó el bibliotecario Efraín Hernández.

Efraín es muy celoso de su trabajo. No deja que nadie más que él, toque los volúmenes. No permite a otra persona acomodar el material didáctico; él enciende y apaga las computadoras parlantes, e imparte clases de informática aunque perdió la vista hace 25 años.

“En la biblioteca tenemos material didáctico para ellos, les enseñamos lo que es el modelo educativo especial, lo que es la enseñanza del sistema braille, la estenografía, el uso del bastón blanco, cartografía; tenemos ocho computadoras parlantes donde pueden escuchar el audio, y la información la pueden imprimir en braille y tenemos escáneres para que puedan configurar su información”, señaló.

Según datos oficiales, en Guanajuato hay al menos 23 mil personas catalogadas como ciegas y débiles visuales. En León viven unas 4 mil personas con esa discapacidad, “por lo que un espacio de esta naturaleza, que esté dentro de una biblioteca pública, es importante para la educación, la enseñanza y la investigación”, dijo el coordinador de la sala braille.

Comentó que en la ciudad de México y en Hidalgo hay bibliotecas similares, “pero en infraestructura y estructura ocupamos el primer lugar; en la ciudad de México tienen 40 usuarios cautivos, pero todos son profesionistas y la sala tiene ya 15 años; la de Hidalgo tiene cuatro años y unos 15 usuarios; este año tenemos 70 más de entre cuatro a 88 años de edad, y nuestra población más fuerte está integrada en escuelas regulares para que puedan usar este acervo” mencionó.

Aunque también hay salas de lectura braille en Monterrey, Nuevo León, y en Guadalajara, Jalisco, Efraín Hernández comentó que esta última está dentro de una zona militar, y la primera forma parte de una agrupación civil.

“Aquí buscamos integrar a las personas ciegas, buscamos que tengan un espacio propio dentro de un edificio público y gratuito. Hay apoyo de una sicóloga y una educadora, porque la idea es trabajar en la parte académica pero también en la parte emocional”, informó la directora de la biblioteca central, María Concepción Rojas Morett.

Desde hace un año, la sala braille ofrece servicios gratuitos, así como actividades didácticas, entre ellas teatro para ciegos, cine club para ciegos y débiles visuales, talleres de sensibilidad y arte.

Recientemente se incluyó el taller “Hazte amigo de un ciego”, donde los asistentes a la biblioteca se cubren totalmente los ojos, y acompañan a un recorrido a los usuarios habituales a la sala braille.

 
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