Cuarto lugar en plataforma sincronizada
Espinosa y Ortiz, cerca del podio
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Los chinos Kai Qin y Fena Wang ganaron en trampolín
Foto: Conade
La dupla mexicana de Paola Espinosa y Tatiana Ortiz se quedó a un punto de subir al podio en la prueba de plataforma sincronizada, mientras Yahel Castillo y Luis Huerta obtuvieron una alentadora medición de sus capacidades al ubicarse en el cuarto puesto del trampolín, al cerrar la Serie Mundial de Clavados con la esperada superioridad de los competidores chinos.
La tarde de gala de clavados en la Alberca Olímpica Francisco Márquez dejó con cierto desconsuelo al público que esperaba ver a los mexicanos con medallas colgadas, pero a todos cubrió las expectativas del alto nivel que se presentó en esta antesala de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.
Pocos presenciaron la semifinal matutina de plataforma varonil que dejó fuera de contienda al vigente campeón mundial, el ruso Gleb Galperin, quien sufrió un tremendo impacto al caer de espalda durante el calentamiento de la prueba.
Galperin, quien perdió la orientación en el aire cuando intentaba un salto de tres y media vueltas atrás y abrió el cuerpo antes de caer horizontal, salió del agua por sí mismo, aunque visiblemente afectado y con un amplio hematoma en la parte baja de la espalda.
Aunque minutos después se reportó listo para iniciar la competencia, el cuerpo médico de la justa y el equipo ruso decidieron retirarlo para someterlo a estudios de rigor. Sin ningún reporte adverso, Galperin permaneció en observación tres horas en el Instituto Nacional de Rehabilitación.
Espinosa y Ortiz, hasta ahora la pareja mexicana con mayor probabilidad para llegar a Juegos Olímpicos, cometieron un par de errores, breves pero los suficientes en relación con la perfección que volvieron a plantear las chinas Ruolin Chen y Xin Wang, o con la consistencia que ofrecieron las canadienses Marie Eve Marleau y Emilie Haymans, ocupantes del segundo lugar, y las alemanas Annet Gamm y Nora Subschinski.
Castillo y Huerta, cuyo máximo nivel está estimado para el siguiente ciclo olímpico, se quedaron anoche fuera de las medallas, pero se percataron de la posibilidad de buscar uno de los ocho puestos para Pekín 2008 que estarán en disputa en la Copa Mundial de Clavados, a realizarse en la misma capital china en febrero próximo.
“En el fondo hay tristeza, pero nos sentimos muy contentos por haber entregado todo y colocarnos delante de los cam-peones panamericanos y la pareja que tiene el tercer lugar del mundo”, expresó Yahel, en referencia a los estadunidenses Troy Dumais y Mitchell Richeson, y a la dupla de los alemanes Frank Sander y Andreas Wels.
La prueba, como todas las demás, fue para los chinos Kai Qin y Fena Wang, seguidos de los canadienses Alexandre Despetie y Arturo Miranda, y los cubanos Jorge Betancourt y Eric Fornaris.
La jornada de finales abrió con la de 3 metros femenil, que aunque fue ganada por Jingjing Guo, se distinguió por no haber sido del toral dominio asiático, pues la gran veterana Minxia Wu falló su tercera ejecución y se fue hasta el cuarto sitio, detrás de la rusa Yulia Pakalina y la estadunidense Nancilea Foster.
En plataforma varonil, los chinos Luxin Zhou y Yue Lin se impusieron por amplio margen a sus contrincantes, el cubano José Guerra y el ruso Dimitri Dobroskok.