Usted está aquí: domingo 2 de septiembre de 2007 Política Para Ramírez Acuña “fue un triunfo de la civilidad”

Primer Informe

Espino: éste es el formato que siempre debió utilizarse

Para Ramírez Acuña “fue un triunfo de la civilidad”

Víctor Ballinas y Ciro Pérez

El hecho de que el presidente Felipe Calderón haya podido usar la tribuna del Congreso de la Unión para entregar su primer Informe de gobierno es “un triunfo de la civilidad, de la responsabilidad y de una visión de futuro en el campo de la política”, afirmó el titular de la Secretaría de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña.

Desde hace muchos años –apuntó el funcionario al abandonar, junto con el resto del gabinete calderonista, el recinto legislativo de San Lázaro–, los actores políticos habían considerado que el Informe presidencial, tal como ocurría, había caducado y que “era preciso iniciar una nueva etapa para darle un nuevo formato; estos son los momentos para hacerlo”.

El presidente nacional del PAN, Manuel Espino, aseveró que lo importante es que se cumplió el mandato constitucional: “Este fue el formato que siempre debió utilizarse, porque –explicó– siempre debió atenderse al pie de la letra este mandato constitucional, sin que hubiese los grandes mensajes y la gran faramalla que se estilaba en el pasado.

“Este fue el primer acto en el que se respetó la Constitución al pie de la letra. En la Constitución y en la ley no está estipulado que el Presidente dirija un mensaje a la nación. Siempre se atendía a una tradición que estableció el PRI cuando fue gobierno, y que tenía como propósito hacer lucir al presidente. Incluso se hablaba hasta de la ceremonia del Informe, pero este es el acto que abre el periodo ordinario de sesiones de Congreso General y se prevé la asistencia del Ejecutivo federal y que entregue por escrito su Informe”, declaró el dirigente blanquiazul.

Enfatizó que en el acuerdo que los partidos tomaron para que Calderón sólo entregara su Informe “no hay desdoro”. Lo que presenció México, añadió, “significa mucho para la imagen presidencial; un Presidente respetuoso del Congreso y de la Constitución”. Asimismo, se pronunció por que en la revisión del formato se haga posible que, en ocasiones posteriores, el titular del Ejecutivo pueda dialogar y exponer sus puntos de vista con los legisladores.

Interrogado sobre la decisión de la bancada del PRD de abandonar el salón de plenos durante la presencia de Felipe Calderón, Espino respondió que eso lo deberán registrar los mexicanos. “Yo no sé cuál fue la motivación de fondo que los llevó a tomar esa decisión, pero finalmente será el pueblo el que valore y el que emita su juicio respecto de esa decisión”, apuntó, luego de señalar que su relación con el partido del sol azteca será “como siempre, de apertura al diálogo y búsqueda de acuerdos; respeto al PRD”.

En tanto, Genaro Góngora Pimentel, ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se abstuvo de opinar sobre si el vacío que hizo ayer el PRD al Presidente de la República ayuda a la democracia mexicana.

“Yo no quiero hablar de la democracia, porque es un concepto de difícil definición; prefiero no decir nada, ya que, como decía mi abuelita: qué bonito te ves calladito”.

Emilio Gamboa, coordinador de los diputados del PRI, apuntó que el Congreso transitó el primero de septiembre “como lo deseábamos: en paz y tranquilidad. El Congreso cumplió. La ciudadanía debe estar tranquila, ya que no hubo violencia, no hubo sangre ni jaloneos; ganamos todos los mexicanos”.

Aseguró que el actual formato del Informe ya no tiene vigencia, porque “el de hoy es un México distinto. Hoy se piden cambios y por eso está en marcha la reforma del Estado. En esta ceremonia no hubo ganadores ni perdedores”. Luego dijo que éste fue el “último Informe a la antigüita”.

Interrogado sobre el hecho de que la presidenta de la mesa directiva, Ruth Zavaleta, abandonó su cargo para salir del salón de plenos en compañía de su bancada, Gamboa subrayó que la legisladora estaba en su derecho: “Es la presidenta de la mesa directiva y representa a un partido. Pronunció un discurso moderado y dejó en claro que tenía un compromiso con su partido y que por eso abandonaba la sala, pero instruyó muy claramente que se quedaba en su lugar el diputado panista Cristian Castaño. Respetamos al PRD. Ellos no reconocen al presidente Felipe Calderón. Zavaleta traía presión de su grupo parlamentario y la acción que tomó permitió transitar”.

Por su parte, el gobernador de Chiapas, Juan Sabines, dijo que es respetable la decisión de los legisladores que optaron por dejar el salón de plenos, pero consideró que la entrega del Informe merece todo el respeto, porque no es un tema de partidos, sino un asunto que interesa a todos los mexicanos.

El gobernador de Campeche, Jorge Carlos Hurtado, se congratuló de que la apertura del periodo de sesiones haya transcurrido de forma civilizada. Como dicen, anotó, “más vale un mal acuerdo que un buen pleito. Creo que esta fue la manera civilizada para solucionar el conflicto, pero falta el diálogo”.

Marco Adame, gobernador de Morelos, convino en que la ceremonia del Informe ha quedado rebasada y el país necesita una nueva definición respecto de la rendición de cuentas.“Es momento de dejar atrás acontecimientos que polarizan al país”, apuntó el panista, quien aseguró que en el PRD imperaron las responsabilidades democráticas.

 
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