Usted está aquí: sábado 25 de agosto de 2007 Política Diputados perredistas pactan rechazar la CETU

Descartan avalar el gravamen a las gasolinas

Diputados perredistas pactan rechazar la CETU

Niega Cota que apoyen en lo mínimo la reforma fiscal de Calderón

Que paguen más los que ganan mucho, añaden

roberto garduño y ernesto martinez (enviado y corresponsal)

Morelia, Mich., 24 de agosto. El pleno de diputados del PRD resolvió rechazar la aplicación de la contribución empresarial de tasa única (CETU), impuesto que recibirá otro nombre y cuya tasa será menor a la promovida en la propuesta de Felipe Calderón. Los representantes del partido del sol azteca también cerraron la puerta al impuesto a las gasolinas propuesto por el Ejecutivo federal, y determinaron otorgar un voto de confianza a los negociadores de su partido en el Congreso de la Unión, defender el régimen de pequeños contribuyentes e impulsar la equidad, a fin de cobrar mayores impuestos a quienes más ganen.

Los diputados perredistas establecieron la urgencia de gravar las utilidades en la bolsa, las actividades de las casas de juego y de sorteos, y de paso enterraron la propuesta fiscal de Calderón.

“De esa iniciativa no queda ni el 20 por ciento. No vamos a impulsar esas medidas regresivas, lo que buscamos es que paguen los que más ganen; es un crimen que los empresarios no cumplan sus obligaciones; por ejemplo, la empresa Dominos Pizza adeuda al erario mil millones de pesos por pago de IVA, y eso manifiesta que el régimen fiscal tiene sus consentidos”, dijo el vicecoordinador de los perredistas, Juan Guerra Ochoa.

Reunidos en privado, los legisladores del PRD también decidieron por unanimidad impulsar la transformación del Consejo de Evaluación, promovido por el gobierno federal.

Una vez que los diputados de ese partido, junto a su dirigencia nacional, definieron dar la espalda en lo general a la CETU, manifestaron que los salarios deben ser neutros; no se puede castigar la generación de empleo, y las cuotas de IMSS, Infonavit y SAR no pueden cargarse al empresario porque provocaríamos la informalidad.

Sobre el tema del régimen de pequeños contribuyentes se argumentó que deben quedar fuera del plan fiscal de Calderón, y se deberá constituir uno nuevo.

Respecto al federalismo, los perredistas manifestaron acuerdo en las fórmulas que le den transparencia a la distribución, y que las entidades acrecienten sus atribuciones recaudatorias. Sobre el papel del gobierno federal, se le obligará a dar por terminados los subejercicios y el manejo discrecional de los recursos del erario.

El diputado Guerra, encargado de la negociación fiscal, explicó a sus compañeros que no existe a la fecha ningún acuerdo con los demás partidos representados en la Cámara de Diputados.

“No hemos elaborado ningún dictamen. En estos momentos habíamos tenido una reunión con el PRI; intercambiamos opiniones y ahora ellos acaban de tener un evento y nos están trayendo resoluciones que tomaron. Nosotros vamos a tener nuestro acto el fin de semana en Morelia y vamos a discutir. No estamos hablando todavía de dictamen, pero lo importante es que en varios aspectos, aun con nuestra oposición a la CETU, estamos tratando de corregir cosas”.

Y es que el tema de ese gravamen es el principal punto de debate entre las fuerzas representadas en el Congreso. Hasta hoy el régimen de transición de ese impuesto manifiesta que no se permite deducir ninguna de las inversiones hechas con anterioridad, y esto es considerado lo más delicado de la negociación, porque la posición es que el nivel de recaudación sería pobre y por añadidura encerraría un sinfín de injusticias, al aplicarse a los sectores más golpeados en el sistema económico financiero, como los empleados.

“Se trata de no cometer injusticias, pero tampoco es para que te hagan carrusel en deducciones y al rato simplemente la CETU va a resultar que no sirvió para nada. Detrás de esto estaba una reforma laboral”, advirtió Guerra.

Por su parte, Leonel Cota Montaño, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRD, negó definitivamente que su partido se enfile en un respaldo mínimo al plan fiscal de Calderón.

“La posición de nuestro congreso es rechazar la reforma fiscal de Calderón. Primero, porque afecta a empresarios pequeños, medios, a profesionistas y, desde luego, sis se establece el impuesto de la gasolina, a toda la sociedad. Y el gravamen a la gasolina es absolutamente inflacionario. Si sube la gasolina, suben absolutamente todas las mercancías en el país. Por ello el PRD lo rechaza por acuerdo unánime”.

También el candidato a la gubernatura de Michoacán, Leonel Godoy, se manifestó por una reforma fiscal que beneficie a las entidades de la República. Recordó que durante su función como secretario de Gobierno estatal, la proporción del cobro de impuestos se ubicaba en 80 por ciento para la Federación y el resto a las entidades.

De tal forma señaló, los gobiernos locales deben cobrar el impuesto sobre la renta (ISR) con objeto de otorgar mayores potestades a la Federación.

En Uruapan, el senador Ricardo Monreal reiteró que su bancada aprobaría la recaudación que vincule ingreso con egreso y reoriente el gasto con prioridad en lo social, junto a una política de austeridad.

Reunidos con empresarios de la región, los senadores del PRD manifestaron respaldo a la propuesta de Godoy para incrementar la partida presupuestal de la Federación para los estados.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.