Usted está aquí: jueves 26 de julio de 2007 Sociedad y Justicia Pone el IMSS en riesgo de quiebra a industria médica

Denuncian empresarios incumplimiento de pagos y multas del instituto

Pone el IMSS en riesgo de quiebra a industria médica

SUSANA GONZALEZ G.

Por incumplimiento de pagos e imposición de multas por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la mitad de las empresas que conforman la industria médica del país se encuentra en riesgo de quiebra, debido a un nuevo sistema de licitaciones impuesto desde finales del sexenio pasado, el cuál sólo ha favorecido a las trasnacionales.

Nunca antes la industria médica había sufrido tal "embestida" del gobierno federal, y las autoridades del IMSS sólo han mostrado "insensibilidad" ante las peticiones de las pequeñas y medianas empresas, que son mayoría en el sector, para que sea modificado el esquema de compras, denunció Ignacio Reyes Vargas, vicepresidente del sector médico de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra).

El nuevo sistema de licitaciones comenzó a operar en octubre del año pasado, y en los casi 10 meses que han transcurrido desde entonces ha provocado que la mitad de las mil 500 compañías que conforman la industria médica del país se encuentre en "situación de sobrevivencia" o a punto de la quiebra.

"Los únicos que han resultado favorecidos con esta medida son los fabricantes de medicamentos de patente, que desde luego son las trasnacionales", denunció.

No obstante "el desplome de la industria nacional", los funcionarios responsables del área de compras del IMSS han vuelto a lanzar, sin cambio alguno, el procedimiento de licitación para el abastecimiento de insumos médico-hospitalarios para 2008.

Por los despidos en el sector, "que se han multiplicado, podemos hablar de que hay 50 mil familias afectadas", indicó a su vez Alejandro Alvarado Hernández, dirigente de la rama industrial 12 de Canacintra, que agrupa a los fabricantes de materiales de curación y dispositivos médicos, el segundo subsector más importante de esta industria, que sólo es superado a escala nacional por los fabricantes de medicamentos y empresas farmaceúticas.

En cuanto a las pérdidas monetarias, Alvarado Hernández precisó que se calculan en 800 millones de pesos, e incluso aseguró que el mayor porcentaje corresponde a las multas que impone el IMSS a las empresas por no cumplir con los envíos, superando incluso los adeudos que tiene la institución con sus proveedores.

Los dirigentes de Canacintra acusaron directamente a Agustín Amaya Chávez y a Alvaro Valdez Girón, responsables de la Coordinación de Abastecimiento del IMSS, así como a Sergio A. Salazar Salazar, quien hasta hace unos meses también estuvo en el área, de "imponer los precios de referencia" en las licitaciones para la compra de fármacos y material médico, aunque ninguna ley les otorgue facultades al respecto, y cuyas decisiones sólo han derivado en procesos ilegales con depredación de tarifas y práctica desigual.

Según Reyes Vargas, esa situación ha sido provocada por lo que llamó "actos de ilegalidad" del Seguro Social, y que generaron que como representantes de la industria médica buscaran la intermediación del Congreso de la Unión para que cite a comparecer al director del instituto, Juan Molinar Horcasitas.

Por lo pronto, para ventilar y discutir el problema, y con el apoyo de la fracción del PRD, los dirigentes del sector industrial médico de Canacintra lograron que hoy, a partir de las 10 de la mañana, se lleve a cabo el foro Competitividad del sector industrial médico y farmacéutico del país, en la Cámara de Diputados.

Reyes Vargas explicó que el IMSS prácticamente ha impuesto "un sistema de subasta en reversa, porque estableció precios máximos de referencia, los cuales están presentados sin fundamento, y las empresas tienen que ofrecer un descuento, porque si no las descalifica". Aunado a ello, se les obliga a hacer entregas en 120 lugares distintos, pero el IMSS no ha cumplido con los contratos y prácticamente sólo ha comprado la décima parte de lo anunciado. "Lo más grave es que nos pagan después de 150 días, y las empresas no tienen recursos para operar y seguir invirtiendo. Pero si no cumplimos con los plazos, entonces los funcionarios del IMSS nos aplican multas leoninas", concluyó.

 
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