''Si llega dinero, no será para nosotros'', deplora un vendedor de artesanías
Autoridades locales se aprestan a festejar el logro
Chichén Itzá, Yuc., 6 de julio. Mientras el gobierno y la televisión de México preparan actos y coberturas para conocer si Chichén Itzá es elegida este sábado entre las Siete Nuevas Maravillas del Mundo, vendedores de artesanías y habitantes del lugar ven con indiferencia y temor ese acontecimiento.
En el sitio arqueológico maya, ubicado en Yucatán, las autoridades alistan una ceremonia con la participación de grupos de baile de la región, que será simultánea a la que se realice en Lisboa para conocer las Nuevas Siete Maravillas del Mundo.
En contraste, los herederos de aquella cultura milenaria manifiestan dudas sobre los beneficios de esa iniciativa.
''¿De qué nos sirve que declaren a Chichén Itzá maravilla del mundo? El gobierno promueve y hace campañas, pero a nosotros nadie nos ayuda; si llega dinero, no será para nosotros", comentó Marcelo, indígena que ofrece artesanías a los turistas.
Marcelo, de 40 años de edad, quien prefiere omitir su apellido, no sabe quién es el viajero y cineasta suizo Bernard Weber, promotor de esa campaña, aunque sí está enterado de la votación por las enormes mantas que promueven a Chichén Itzá.
''Los vendedores no estamos en contra, qué bueno que Chichén Itzá sea una maravilla del mundo, pero los habitantes de los dos pueblos vecinos no ganamos nada, apenas vendemos artesanías para sobrevivir", añadió.