Operan en zonas donde el transporte público urbano no quiere ingresar
Demandan taxistas de la montaña al GDF certidumbre para laborar
Su labor va más allá de sólo conducir sus unidades, argumentan los operadores
Dirigentes de organizaciones de "taxis de la montaña" pidieron al gobierno capitalino que les brinde certidumbre jurídica para trabajar sus unidades, las cuales prestan el servicio que los taxis de las zonas urbanas no quieren cumplir en delegaciones como Tláhuac y Milpa Alta, donde las calles están terregosas y deterioradas.
En conferencia de prensa realizada en la sede de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), los operadores de esos taxis mencionaron que incluso cumplen funciones que van más allá del traslado de gente, y citaron, por ejemplo, que las señoras les encargan a sus hijos para llevarlos a la escuela, trasladar a personas mayores a consultas y regresarlas a su casa, y hasta ir por el gas e incluso instalarlo en las viviendas.
Acompañados del diputado del PRD Sergio Avila Rojas, los inconformes mencionaron que los "taxis de montaña" operan exclusivamente en puntos específicos de cuatro demarcaciones: Milpa Alta, Tláhuac, Xochimilco y Tlalpan.
Reconocieron que hasta ahora se han acercado al Partido de la REvolución Democrática en el ánimo de obtener respuesta positiva a su demanda, y los han acompañado a sus eventos proselitistas, pero aún está pendiente que la Secretaría de Transporte y Vialidad les resuelva en definitiva su situación.
Según el legislador del sol azteca, hay vecinos de esas delegaciones que están a favor de promover firmas de apoyo para que las autoridades correspondientes los regularicen y presten sus servicios sin que nadie pretenda extorsionarlos o sean perseguidos o estigmatizados por los ciudadanos o por algunos diputados locales.
Presentan denuncia penal contra líderes de taxis piratas
Por otra parte, el diputado local panista Jacobo Bonilla Cedillo presentó ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) una denuncia penal contra seis líderes de agrupaciones de taxistas piratas, entre ellos José Guadalupe Quintero, hermano del secretario de transporte capitalino, Armando Quintero.
Con base en los artículos 164 al 166 de la ley local en la materia, el legislador acusa a los dirigentes Miguel Angel Flores, Sergio Juárez, Adalberto Gaytán Aguilar, Alvaro Castillo, Bruno Espejel Bazaldúa, Noé Hernández y Julio Loera, de los delitos de incitación y prestación ilegal de servicio de transporte público, por lo que podrían ser acreedores de una pena de entre tres meses y seis años de cárcel.
Bonilla Cedillo hizo un exhorto al gobierno capitalino a mostrar voluntad política para solucionar esta problemática, ya que en la ciudad de México diariamente circulan alrededor 40 mil taxis piratas, y pidió a las autoridades del ramo aplicar mano dura contra los transportistas que prestan este servicio de manera irregular.