Usted está aquí: viernes 1 de junio de 2007 Mundo Pena de muerte, en el diálogo sobre derechos humanos de Cuba y España

Cada parte "tocó los temas de su interés", afirman

Pena de muerte, en el diálogo sobre derechos humanos de Cuba y España

GERARDO ARREOLA

La Habana, 31 de mayo. Cuba y España informaron hoy que su primera sesión de diálogo sobre derechos humanos se realizó en un "ambiente cordial, franco y constructivo" que permitió a cada parte tocar "todos los temas" de su interés, entre los cuales estuvieron la pena de muerte y los sistemas penitenciarios.

Un comunicado conjunto divulgado este jueves fue la única información directa de las conversaciones, el primer ejercicio de su tipo que realiza Cuba con un país de la Unión Europea (UE) y el segundo desde una efímera experiencia con Canadá en 1997.

El texto refleja la disposición cubana para discutir con otro gobierno una agenda que la isla suele reclamar como de exclusiva incumbencia interna.

El resultado más apreciable del encuentro, realizado aquí el martes y el miércoles, es que un tema de alta sensibilidad quedó sometido a un mecanismo en el cual ambas partes se hablan a la cara, reconociendo las discrepancias y sin que el debate condicione directamente otros puntos de la agenda bilateral.

La discusión, dijo el comunicado, continuará dentro del mecanismo de diálogo político acordado el mes pasado entre Madrid y La Habana y que tendrá su primera sesión en Nueva York, durante el 62 periodo de sesiones de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas.

El diálogo hispano-cubano antecede a la cumbre semestral de la UE, que se celebrará en junio en Bruselas y en la cual el bloque comunitario podría prorrogar la suspensión de las sanciones diplomáticas que adoptó en 2003 contra la isla, en represalia por la condena masiva de opositores y el fusilamiento sumario de tres secuestradores de una lancha.

El temario de la reunión tuvo puntos de contacto con aquella decisión europea, al incluir la pena de muerte y los sistemas penitenciarios "en todos sus aspectos, tanto institucionales como humanos".

Cuando Cuba fusiló a los secuestradores, en abril de 2003, no se disponía de informes sobre la aplicación de la pena capital desde mediados de 2000, por lo cual se interpretaba que estaba en vigor una virtual moratoria.

Sin que haya confirmación oficial, Amnistía Internacional estima que en Cuba hay alrededor de 60 prisioneros condenados a la pena capital, pero desde hace cuatro años no se tienen nuevos reportes de su aplicación.

El comunicado indicó que Cuba y España también discutieron "el disfrute individual y colectivo de todos los derechos humanos para todos, así como el marco jurídico e institucional para la promoción y protección de los mismos", en lo que parece una alusión al interés de La Habana de enfocar el debate en forma integral y no exclusivamente sobre las libertades civiles.

En la misma línea, las partes abordaron "la cooperación internacional en materia de derechos humanos" y la defensa de esas garantías "en la lucha contra el terrorismo internacional".

Las delegaciones estuvieron encabezadas por el vicecanciller cubano para Asuntos Multilaterales, Abelardo Moreno y el director general de Política Exterior de Espala, Rafael Dezcallar.

En enero de 1997 Cuba convino con Canadá un mecanismo similar, que el gobierno de Ottawa abandonó seis meses más tarde, cuando fueron encarcelados cuatro activistas opositores.

 
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