El ex subsecretario de la SEP respondió las 125 preguntas de esa evaluación y pide retirarla
Enlace no tiene salvación y profundiza el retraso educativo: Fuentes Molinar
''México va a contracorriente de los sistemas más avanzados, donde la palabra clave es comprensión''
El ex subsecretario de Educación Pública Olac Fuentes Molinar se dio a la tarea de hacer un minucioso análisis de la Evaluación Nacional del Logro Académico en Centros Escolares 2007 (Enlace), para lo cual respondió cada una de las 125 preguntas del examen de sexto de primaria y los138 reactivos del de tercero de secundaria, después de lo cual obtuvo el siguiente resultado: ''Puede haber media docena de cuestiones que obliguen a pensar'' al alumno. Por ello afirmó que si la Secretaría de Educación Pública (SEP) actuara con responsabilidad y buen juicio tendría que retirar esa prueba, que ''no tiene salvación''.
Explica: premia la memorización, las instrucciones simples, la localización de información literal, con frecuencia irrelevante y banal; la resolución de seudo problemas, entre los que no faltan el reparto de pasteles y las ventas en una kermés.
Entrevistado por La Jornada, el experto en educación asegura que Enlace representa ''un riesgo cierto de regresión educativa muy aguda'' y un ''obstáculo insalvable para la renovación y la diversidad'''.
Por ejemplo, destaca que en estos largos y fatigosos exámenes llama la atención que la comprensión de la lectura, meta prioritaria de todo sistema educativo avanzado, se reduzca a una serie de actividades fragmentadas y elementales, como localizar un párrafo o señalar en qué lugar ocurre una acción.
Matemáticas sin razonamiento
Como se puede verificar en esa prueba, los textos ''son pretexto para realizar ejercicios y no un material para lograr la comprensión del sentido, para inferir, anticipar, contrastar, interpretar y opinar''.
Mientras que en matemáticas -disciplina que junto con la de Español pretende medir Enlace- el ''gran ausente'' es precisamente el razonamiento matemático. La abundancia de operaciones y de aplicación de fórmulas es muy grande y no se encuentra una jerarquía temática que permita saber si los alumnos piensan con esta materia.
En sexto grado, añade, se transita de una resta a algo de uso tan improbable como calcular el volumen de un prisma hexagonal.
De esta manera, el ex subsecretario de Educación Básica observa que el efecto ''más dañino y más corrosivo de la prueba Enlace no está en sus resultados'', sino en el mensaje que las autoridades envían a las escuelas, a los alumnos, a los maestros y a las familias. Se quiera o no, en los hechos se le dice a la comunidad escolar que localizar un párrafo o aprenderse una serie de fórmulas es el conocimiento que se debe saber y que es el necesario porque viene en el examen.
Al igual que otros especialistas y maestros frente al aula, Fuentes Molinar considera que Enlace pone la prioridad no en aprender sino en aprobar un examen, consagrado ahora en una forma única y de alcance nacional. Su contenido y las formas ''adecuadas'' para enseñarlo se convierten en un ''supra currículo obligado'' por encima de los planes de estudio.
Y ''crea una especie de uniformidad hacia abajo, en términos de aspiraciones educativas'', sostiene.
Por ello, cuestiona: si ahora hay que ''capacitar'' a los alumnos para el examen, ¿quién le dedicará tiempo a montar una obra de teatro, a la observación y al experimento en ciencias?, ¿cómo atender a los que se rezagan y a los que tienen sus propios estilos de aprender?
Bajo esa óptica, lamenta, México va a contracorriente de los sistemas educativos más avanzados, donde la palabra clave es la comprensión. Por ello, considera que en términos pedagógicos, lo mejor que nos puede pasar es que Enlace sea irrelevante.
Sólo seis preguntas implican ejercer el pensamiento crítico
Por último, el especialista aclara a la autoridad educativa que no se requiere de este tipo de evaluaciones para conocer los criterios de apoyo a las escuelas, que ya son muy claros: Se necesitan 80 mil millones de pesos para dignificar los planteles, así como buenos maestros que acompañen a los niños durante todo el ciclo escolar y revertir la política de darle lo peor a quienes están en las condiciones más vulnerables.
Después de analizar 263 preguntas, de las cuales ''puede'' haber seis que impliquen la necesidad de ejercer el pensamiento crítico, insiste en que lo mejor es retirar el examen porque profundizará el retraso educativo real.