Autoridades de Venustiano Carranza detuvieron a 15 personas, entre ellas 10 menores
Clausuran siete hoteles en La Merced por permitir el sexoservicio infantil
Suponen que dueños de los establecimientos reclutan a niños y luego les cobran cuotas por cada cliente
También hallaron consumo de drogas y falta de medidas de protección civil
Ampliar la imagen
Algunas de las latas flameadas que presuntamente eran utilizadas para el consumo de crack, descubiertas ayer en una habitación del hotel Hispano, en La Merced
Foto: Francisco Olvera
Siete hoteles de la zona de La Merced fueron clausurados por incurrir en irregularidades como el presunto sexoservicio infantil, consumo de drogas y falta de medidas de protección civil. Durante la verificación que realizaron las autoridades de la delegación Venustiano Carranza en los establecimientos se remitió a 15 personas, entre ellas 10 menores de edad, tres de los cuales declararon dedicarse a la prostitución, mientras que el resto eran adultos, dos en posesión de drogas.
El operativo se inició a las 8:00 de la mañana. Simultáneamente, personal de Jurídico y Gobierno, Mercados y Vía Pública, Protección Civil y de la territorial Morelos ingresaron a ocho inmuebles localizados en los límites de la delegación Venustiano Carranza a unos pasos de la avenida Anillo de Circunvalación, donde el ejercicio de la prostitución es una práctica común en la zona.
La oferta del sexoservicio se da a todas horas, en ella intervienen menores de ambos sexos así como adultos y los encargados de los hoteles, quienes presuntamente operan en complicidad, señalaron las autoridades. Ayer, durante la verificación del hotel Liverpool un menor de 13 años, quien dijo llamarse Angel N, fue encontrado en los pasillos del segundo piso de dicho inmueble.
Al parecer, el pequeño salió de una de las habitaciones que, según declaró, rentó en compañía de un "señor", quien le pago por sus servicios 50 pesos. Su cabello estaba húmedo y vestía una sudadera color naranja, pantalón de mezclilla y andaba descalzo.
El menor, oriundo del estado de Oaxaca, platicó que tenía cinco hermanos y que su madre lo dejó en el hotel. Reconoció que no era la primera vez que ingresaba al establecimiento con hombres, quienes le pagan entre 50 y 100 pesos.
Pocas fueron sus respuestas, pues a cada cuestionamiento incómodo el pequeño sólo señalaba: "ya no quiero hablar más español", evidenciando en sus palabras el acento de su dialecto.
La revisión de las autoridades fue en cada una de las habitaciones, algunas rentadas por familias completas, otras por parejas, mujeres solas o acompañadas; la mayoría de los huéspedes eran provenientes de estados como Puebla, Oaxaca, Tlaxcala o Veracruz, aunque también los había del Distrito Federal.
En el hotel Gran Veracruz, localizado en Anillo de Circunvalación número 130, esquina Corregidora, se encontró a Julia N. Por sus características físicas aparentaba ser menor de edad, sin embargo, lo negó y presentó una credencial de elector apócrifa. La pequeña reconoció dedicarse a la prostitución desde hace dos años y habitar en el hotel, al que paga 50 pesos diarios por su estancia.
En el Hispano, localizado en Corregidora número 116, detuvieron a dos sujetos inhalando cocaína y en un par de habitaciones se encontraron latas flameadas con residuos de crack, así como sustancias sicotrópicas.
Mientras que en el Balbuena, asentado en la calle de Carretones número 136, una menor compartía con un sujeto mayor la habitación. El hombre se negó a dar sus datos personales y sólo manifestó ser familiar de la pequeña, sin embargo, no pudo acreditar su parentesco y fueron remitidos al Ministerio Público.
Los establecimientos denominados Necaxa, Roma y D Casa fueron sancionados por incumplir medidas de protección.
El operativo fue encabezado por el jefe delegacional de Venustiano Carranza, Julio César Moreno Rivera, quien señaló que los inmuebles tendrán una constante verificación y buscará iniciar negociaciones con las organizaciones del sexoservicio para su regulación: "veremos horarios y zonas donde se podrán establecer".
Por su parte el encargado de la territorial Morelos manifestó que existe la presunción que los mismos dueños de los establecimientos reclutan a los menores y sexo servidoras que no son de la ciudad, "les ofrecen alojamiento y luego, por cada cliente, les cobran una cuota", comentó.